Los bancos centrales de todo el mundo se han vuelto dovish y los programas de compras están volviendo a la agenda política, liderados por el BCE, que se compromete a continuar el QE «durante el tiempo que sea necesario», para que la inflación vuelva a su objetivo. Según Allianz GI, esto ha creado un nuevo marco para los activos de renta fija, en el que los gestores han tenido que aprender a bucear para encontrar las mejores oportunidades.
Según la última reunión del equipo de renta fija de Allianz GI, centrada en analizar el mercado de high yield y de la deuda con grado de inversión, las decisiones de los bancos centrales también afectan a estos activos. “Se espera que la segunda parte del BCE del programa de compras del sector crediticio sea marginalmente positiva para el crédito investment grade en euros, aunque menos positivo que en 2016 debido a los diferenciales más ajustados, los altos niveles de emisión, los fundamentos más débiles y la dinámica del ciclo tardío”, señala el documento.
En el caso del high yield, el apalancamiento ha aumentado marginalmente, pero también la cobertura de intereses ha dado tasas más bajas para los mercados de EE.UU. y Europa. “Los indicadores habituales siguen siendo favorables respecto a la refinanciación; la mayoría de los rendimientos de los bonos se utilizan para fines de refinanciación en lugar de fusiones y adquisiciones o pagos de dividendos”, destacan desde Allianz GI.
El equipo de renta fija ve valor en algunos nombres con calificación B pero, advierte, “siendo muy selectivos”. En cambio ven “cierta convexidad negativa” en algunos títulos BB, dentro de los niveles actuales. “Sin embargo, la incertidumbre económica supondrá que la deuda BB se mantendrá bien y la clave del éxito del gestor será la disciplina de valoración”, añaden.
Asignación de activos
Con este contexto de fondo y después de la recuperación que ha vivido la renta fija este año, la gestora mantiene una posición de cautela y una visión defensiva en deuda investment grade dada la poca alza que han experimentado los spreads. “Sin embargo, dada la retórica moderada del banco central, somos tácticamente constructivos durante los próximos dos o tres meses, aunque consideramos que no es el momento de agregar más exposición. Históricamente, agregar riesgos en medio de un ciclo de reducción de tasas ha afectado negativamente los rendimientos”, argumenta Allianz GI en su último análisis.
En su asset allocation, la gestora tampoco ha realizado cambios en su posicionamiento beta. “Preferimos títulos con calificación BB en dólares con diferenciales similares con el euro, así como pertenecientes a economías más saludables. Seguimos infraponderados en CCC, compensándolo con una sobreponderación de BB y B. También seguimos siendo cautelosos con respecto al crédito de mercados emergentes debido a las valoraciones y la fortaleza del dólar estadounidense, pero seguimos buscando oportunidades en este universo”, explica.
Por último, la gestora vigila los principales eventos políticos que han sido una constante a lo largo de 2019, en especial el proceso del Brexit y las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. Ambas situaciones han marcado sus decisiones a la hora de hacer la asignación de activos de renta fija.
“Estamos infraponderados en aquellos sectores que pueden estar afectados por la disputa arancelaria entre Estados Unidos y China, incluidos sectores como el del automóvil, el tecnológico o el de productos químicos. En cambio, estamos sobreponderados en sectores con una mejor exposición directa a este riesgo, como los servicios públicos o los bancos. Respecto al Brexit, y a la espera de que evolucione la situación, creemos que los diferenciales no recompensan los posibles riesgos a la baja. Por lo tanto, no creemos que sea un buen momento para buscar exposición al sector bancario británico”, concluye.