Qué ocurrirá con la inflación este año es una pregunta corta, pero nada sencilla. “El aumento de la inflación durante este año será moderado, pero suficiente para un endurecimiento por parte de los bancos centrales”, señala Vicent Chaigneau, jefe de investigación macroeconómica de Generali Investments. En su opinión, la inflación será algo relevante en 2018 porque marcará el ritmo de la subida de tipos de los bancos centrales.
“Después de la gran crisis financiera, los bancos centrales han puesto a la economía y los mercados mundiales en rehabilitación durante la mayor parte de los últimos diez años. Ahora que la economía mundial parece más sólida y estable, es hora de que los bancos centrales reduzcan sus apoyos a la economía. Cómo se ajusten los mercados globales a los bancos centrales retirando este apoyo definirá el próximo año fiscal”, afirma.
Chaigneau reconoce que esta combinación de crecimiento sólido y baja inflación ha sido una bendición para los mercados internacionales. Según las perspectivas de Generali Investments para este año, el crecimiento mundial mantendrá su solidez en 2018 –quizá con algún matiz–, pero habrá un repunte moderado de la inflación.
En su opinión, sigue habiendo vientos en contra estructurales, pero las fuerzas cíclicas apuntan al alza. “Incluso en la zona euro, está creciendo la presión sobre la inflación. A medida que las empresas llenan sus carteras de pedido y luchen por encontrar personal especializado, la presión sobre los costes y los precios aumentar”, explica.
En el mercado, los inversores están dando por hecho la salida de esta política monetaria expansiva será súper lenta, pero Chaigneau no. “Es probable que la inflación repunte en 2018, sobre todo en los Estados Unidos. El aumento será moderado, pero lo suficientemente significativo como para que los bancos centrales muestren sus dientes”, argumenta.
Como consecuencia del repunte de la inflación y de la subida de tipos por parte de los bancos centrales, se generará presión leve sobre las tasas reales a largo plazo, que hasta ahora se han mantenido sorprendentemente bajos. “Esto afectará a todo el mundo porque unos tipos reales bajos están en la base de las sobrevaloración de la mayoría de clases de activos”, advierte Chaigneau.
Estrategias de inversión
En este contexto, Generali Investments mantiene un enfoque selectivo del riesgo favorece los activos reales, las acciones europeas y japonesas. “En nuestro escenario central, el leve aumento de los diferenciales aún ve al crédito europeo comportarse mejor que la deuda pública de la zona Euro en 2018; aunque ambos arrojan rendimientos negativos. Vemos valor en acortar la exposición crediticia en bonos de alto rendimiento (high yield). Ademas, favorecemos los activos reales, la renta variable europea y japonesa, y deuda seleccionada de mercados emergentes de corta duración denominada en divisa fuerte”, apunta Chaigneau.
En resumen, la gestora señala que conviene empezar a posicionarse de forma más selectiva, pero también dedicar más tiempo a las coberturas y a sus primas sobre opciones, que están baratas.