Por primera vez después de la victoria de Donald Trump en las elecciones, Janet Yellen habló ayer tarde ante el Comité Económico del Congreso estadounidense. Más allá de asegurar que terminará su mandato al frente del organismo, en 2018, la presidenta de la Reserva Federal envió una señal clara a los mercados, confirmando la visión generalizada de que la economía de Estados Unidos está lo suficientemente fuerte como para pasar a la segunda fase.
La Reserva Federal podría subir las tasas de interés “relativamente pronto”, según sus palabras, si los indicadores económicos siguen apuntando a mejoras en el mercado laboral y a una inflación que se acelera. En su discurso en el Capitolio, Yellen destacó en particular las recientes señales de repunte en los salarios, aunque en los últimos días se han conocido datos económicos que apuntan a que el país parece estar en una senda de crecimiento moderado.
“Sabiendo que los datos más recientes en realidad ya han confirmado este progreso, Yellen valida implícitamente la hipótesis de endurecimiento de la política monetaria en diciembre”, explica Christophe Morel, economista jefe de Groupama AM.
Admitió además, que la Fed debería continuar con el endurecimiento particularmente por dos razones: para no correr el riesgo de tener que acelerarlo más adelante y para no alimentar los riesgos sobre la estabilidad financiera.
“Su análisis fundamental no ha cambiado aunque algunos indicadores del mercado de trabajo no han mejorado lo suficiente, sobre todo los indicadores de inserción así como la tasa de desempleo en las comunidades hispanas y afro-americanas. Y sobre todo, todavía considera que la tasa de equilibrio es sosteniblemente baja, si bien la política monetaria no es tan acomodaticia como parece. Por lo tanto, el riesgo de que la Fed esté «behind the curve» a corto plazo es limitado, y el endurecimiento está destinado a permanecer progresivo en los próximos años”, cree Morel.
Las propuestas de Trump
La presidenta afirmó también que los resultados de las elecciones presidenciales de Estados Unidos no habían alterado la análisis de la situación del banco central, que después de su reunión a principios de este mes, decidió que el cuadro económico sentaba las bases para una subida de tipos.
Eso sí, Yellen añadió que existe “un alto grado de incertidumbre” y necesita “más claridad” sobre las políticas propuestas por Donald Trump, antes de valorar sus efectos sobre las perspectivas económicas.