La consultora Willis Towers Watson ha hecho públicos dos informes que describen cómo los inversores institucionales pueden asignar capital a China, al tiempo que gestionan los riesgos y oportunidades impulsados por los factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG).
El análisis expone que, aunque los mercados de capitales chinos ofrecen ventajas de diversificación y atractivas oportunidades de generar alfa para los inversores a nivel mundial, los retos sustanciales de la Inversión Sostenible (IS) han hecho que estos se muestren, al mismo tiempo, cautelosos.
El estudio de WTW muestra que, mediante un enfoque de cartera integral y una gestión activa de los activos chinos, los inversores pueden obtener los beneficios de diversificación y de rentabilidad esperada a largo plazo sin un impacto negativo en su perfil general de sostenibilidad.
«La inversión sostenible no consiste únicamente en integrar adecuadamente la información relacionada con las cuestiones ESG a efectos de gestión del riesgo. También, se trata de reconocer que los temas relacionados con cuestiones ESG a largo plazo, como el cambio climático, pueden crear oportunidades de inversión.
En los últimos años, China ha surgido como líder mundial en la financiación y el desarrollo de tecnologías para combatir el cambio climático, y su promesa de cero emisiones netas influirá en gran medida en las políticas económicas y climáticas de las próximas décadas», señala Liang Yin, director del equipo de investigación de Inversiones de WTW y responsable del proyecto en China.
«De cara al futuro, esperamos que China sea una fuente importante de oportunidades de inversión impulsadas por el cambio climático», completa. Los datos demuestran que, en los últimos años, el desarrollo de la ISR en China ha recibido un importante impulso, lo que puede desencadenar fuertes rentabilidades futuras.
Un enfoque de cartera integral considera cada factor de riesgo de forma agregada en toda la cartera, en lugar de sólo en cada clase de activo. Este marco permite a los inversores reducir la exposición a los activos con características negativas en términos de sostenibilidad en otras partes de la cartera y aumentar la asignación en activos chinos con un mejor enfoque ESG y mejor binomio rentabilidad riesgo. El aumento de la exposición a activos sostenibles, por ejemplo, las inversiones en soluciones climáticas, puede contribuir a equilibrar el perfil general de sostenibilidad.
Además, una gestión activa adecuada puede reducir significativamente la exposición al riesgo relacionado con las malas prácticas ESG que a veces pueden encontrarse en China. A la hora de seleccionar gestores de inversión, debe hacerse hincapié en la integración de los aspectos ESG estando la gestión basada en estos principios
«La gestión activa en China no solo es necesaria para la búsqueda de Alpha sino que es la forma de asegurarnos que tenemos un impacto positivo en la sociedad mediante una correcta integración de la sostenibilidad en el proceso de inversión», afirma Alejandro Olivera, Associate Director de Inversiones en España.
«Acceder a las grandes oportunidades de China y, al mismo tiempo, navegar por su complejo panorama de IS puede suponer un importante reto de gobernanza para muchos inversores. Sin embargo, el beneficio de hacerlo compensa el riesgo y los costes adicionales. Los inversores no deben tener necesariamente presencia en China o personal interno que sepa hablar el idioma, pero sí contar con socios locales bien dotados de recursos en los que puedan apoyarse a la hora de tomar decisiones de asignación y selección de gestores», añade Liang.
El análisis de escenarios realizado por WTW sugiere que los activos chinos pueden llegar a representar el 20% de las carteras de crecimiento de los inversores mundiales en los próximos 10 años. A pesar de los recientes progresos realizados por los responsables políticos en cuanto a la apertura de los mercados de capitales nacionales de China, la asignación institucional media a este país se mantiene en un nivel bajo, en torno al 5% (de las carteras de crecimiento) China presenta una sólida oportunidad de inversión, pero la exposición a China debe ser un proceso que equilibre el ritmo de las mejoras del mercado con el imperativo de lograr la diversidad en una cartera global.
El informe, «China a través de la lente de la inversión sostenible», se publica en dos documentos: «Parte 1: Los argumentos para incluir a China en una cartera centrada en la sostenibilidad» y «Parte 2: Incorporación de los aspectos ESG en el diseño de la cartera y consideraciones de aplicación». Ambos pueden descargarse aquí.