El 2013 podría ver incremento en las tasas tributarias principalmente por la eliminación de descuentos y extensiones. En promedio el 75% de los rendimientos obtenidos actualmente tienen descuento.
Con la incertidumbre generada por la cercanía del Fiscal Cliff, William Blair & Company hace un breve análisis de lo que podría suceder con los impuestos en el sector a partir del próximo 1ro de enero, y comparte algunas expectativas de cómo podría reaccionar el mercado.
En un documento emitido por la compañía en noviembre, Brian D. Singer, Líder del Equipo de Estrategias de Asignación Dinámica de William Blair, comenta la importancia de analizar los antecedentes históricos y comparte las siguientes conclusiones.
Tasas impositivas (Tax Rates)
Datos del IRS (Internal Revenue Service) agencia americana encargada de la recolección y regulación de impuestos, revelan que en el año 2009 el 75% del total de los dividendos obtenidos en los Estados Unidos recibía alguna tasa de descuento preferencial, cifra que se ha mantenido estable hasta hoy. William Blair estima que hay potencial para incrementar al menos entre el 15% y el 43,3% la recaudación promedio en inversiones tan sólo retirando las preferencias tributarias.
Los cambios
Para ejemplificar los cambios, Brian Singer toma como muestra el sector de inversiones con la mayor carga impositiva, el Top marginal Tax Rate, del que en la actualidad se pagan impuestos por el equivalente en cuentas al 43,4% para dividendos y 23,8% para plusvalía (Capital Gains). La expectativa es que las extensiones y descuentos en este sector se vean reducidas en el 40% y el 15% de las cuentas respectivamente.
Los antecedentes
Porción de Dividendos y Capital Gain (plusvalía) sujeta a impuestos.
La porción de equity holdings que está exenta de impuestos ha crecido dramáticamente desde 1950 cuando se encontraba por debajo del 10%. Utilizando la información más reciente del IRS, el reporte indica que el 30% de las cuentas de dividendos y plusvalía serán sujetas a impuestos este año y dada su naturaleza relativamente estable se puede anticipar, que de no presentarse ningún cambio, se mantenga esta situación durante el 2013.
Porción del Total Return ganado a través de Dividendos y Apreciación del Precio.
Esta categoría se caracteriza por tener mucha variación con el tiempo y ha demostrado que bajo el régimen fiscal actual, la contribución impositiva ha sido mucho más baja que en el pasado. Lo que significa un declive en la razón histórica de pago de impuestos. Para algunos analistas esto supone una buena oportunidad de ajuste. Actualmente se estima que las extensiones de impuestos en este sector alcancen al 71% de las cuentas, lo que significa que solamente el equivalente al 29% tiene carga impositiva.
Reacciones del mercado
“Cuando se habla de que los inversionistas necesitan ciertas compensaciones por tomar riesgos, nuestra atención suele dirigirse a lo que es considerado como riesgos variables.” En este análisis William Blair mantiene el riesgo como una constante y se enfoca en la compensación. “La compensación es el rendimiento esperado de flujos de efectivo futuros después de pasadas todas las fricciones del mundo real. Estas fricciones incluyen cuotas de administración, costos de transacción e impuestos. Conforme estas fricciones incrementan, la compensación o flujo de efectivo se reducen.”
Un incremento en impuestos llevaría a una expectativa de mayores rendimientos brutos (rendimientos antes de aplicar los impuestos), de manera que se compense la suba de impuestos y se mantengan estables los rendimientos netos obtenidos en las inversiones.
El Fiscal Cliff (Abismo Fiscal)
Surge de las negociaciones de agosto del 2011 entre Republicanos y Demócratas en las que se tenía como fin elevar el techo de la deuda. El resultado vio la aprobación de una serie de recortes en el gasto federal que entrarían en vigor a finales de año, suponiendo el caso de que la Casa Blanca y el Congreso no lograran llegar a un acuerdo para solucionar el problema del déficit americano. Estos impuestos lograrían un aumento de 700.000 millones de dólares en la recaudación.
El problema viene desde la época en que George W. Bush era Presidente, cuando se aprobó una serie de recortes de impuestos y que se verían eliminados automáticamente de no darse algún acuerdo en Washington. Esto supondría que millones de familias y empresas tendrían que empezar a pagar más impuestos de la noche a la mañana, lo que podría hacer que el país caiga de nuevo en una recesión. Algunos analistas estiman que también podría aumentar el desempleo hasta niveles por encima del 9%.
Puede descargar el white paper en el archivo adjunto.
AMV