En un entorno cercano al final del ciclo, conviene reducir la exposición a bolsa, y así lo han hecho en sus fondos en Amiral Gestion, según reconoce Louis d’Arvieu, gestor coordinador del Sextant Grand Large, en esta entrevista con Funds Society. Sextant Grand Large es uno de los fondos más representativos de la entidad, un fondo mixto flexible, que invierte en renta variable global. El gestor confiesa que en este momento prefieren invertir en Asia antes que en Estados Unidos.
Estamos en la parte final del ciclo… ¿sigue siendo buen momento para la renta variable, y hay que aumentar exposición o reducirla en estos momentos?
En la parte final del ciclo, tiene sentido reducir la exposición en comparación con los tiempos normales, ya que la renta variable es muy sensible a cualquier giro del ciclo económico. En nuestro fondo flexible Sextant Grand Large, que se supone que tiene una exposición media del 50% a la renta variable, actualmente sólo tenemos una ponderación del 28%.
¿Cómo valora el nuevo impulso de los bancos centrales a los mercados y su extensión artificial del ciclo? ¿seguirá siendo un factor favorable, para la renta fija y las bolsas?
En Amiral Gestion no utilizamos ni hacemos ningún escenario macroeconómico. Para nosotros, el factor principal a tener en cuenta en la rentabilidad a el largo plazo es la valoración en el punto de partida. Por lo tanto, no tenemos ninguna opinión sobre las intervenciones de los bancos centrales.
¿Cuáles son los principales riesgos ahora mismo para la renta variable?
En el momento actual consideramos que el principal riesgo para la renta variable son las altas valoraciones, sustentadas por tipos de interés sosteniblemente bajos nunca antes vistos y, por lo tanto, niveles de deuda récord, máxima eficiencia de los bancos centrales, y así sucesivamente. La renta variable es mucho más sensible a las recesiones que a la mayoría de los acontecimientos geopolíticos.
En este escenario, y a pesar de los riesgos, ¿cómo veis los fundamentales de las empresas en las que invertís?
Invertimos cuando las valoraciones son baratas comparadas con la calidad de la empresa. En este sentido hay una mezcla en nuestros fondos de empresas de alta calidad y resistentes a la recesión a precios razonables, de empresas ligeramente cíclicas a precios baratos o de empresas altamente cíclicas a precios deep value. ¡No confiamos en nuestro pronóstico ni en ningún pronóstico de 12 meses! Sin embargo, dedicamos mucho tiempo a evaluar cuál sería el potencial de ganancia de una compañía a mitad del ciclo de cinco años o más.
Pero también es un escenario en el que el value parece no dar muy buenos resultados, ¿por qué?
El value en el sentido de empresas de gran valor y estadísticamente baratas no ha dado muy buenos resultados desde el último GFC, pero lo ha hecho excepcionalmente bien entre 2000 y 2007. En los últimos dos años, es cierto que el value en el sentido más amplio de inversión fundamental, incluyendo algunas ideas de la GARP, por ejemplo, ha comenzado a no funcionar bien. El comportamiento de los mercados bursátiles se ha polarizado cada vez más entre los valores de crecimiento visible, que recientemente se han vuelto aún más caros, y los valores de cualquier tipo, que se han vuelto aún más baratos. Desafortunadamente no puedo vaticinar cuánto tiempo puede durar esta situación y puede durar tanto como vimos en 1969 o 1999…. Pero los reveses vienen y son brutales.
¿Resulta más fácil o difícil encontrar oportunidades value que en el pasado, debido a los precios artificiales que crean los bancos centrales?
En ese entorno es más fácil encontrar oportunidades value, pero el truco es que hay que tener paciencia, ya que puede que todavía no funcione bien durante un tiempo más. Pero si observamos los sectores cíclicos, en las empresas de pequeña capitalización, en las acciones asiáticas y europeas se pueden encontrar muchas oportunidades value.
Tenéis en cartera renta variable francesa… cuáles son los sectores donde veis más oportunidades? ¿Os asustan los datos macroeconómicos de Francia?
Hacemos pura selección de acciones (stockpicking) y una cartera de empresas muy diversa en términos de sectores en Francia; desde el Grupo Guillin, que es el líder europeo de packaging en la industria de alimentos, hasta Jacquet Metals en la distribución de acero o el Grupo Crit, en la contratación de personal temporal. No somos negativos con los datos macroeconómicos de la economía francesa. Sin embargo, nuestro enfoque de inversión es puramente bottom-up, por lo que nos vemos influenciados por la macro en términos de construcción de carteras, aunque evitaremos las empresas con demasiada deuda cuando el panorama macroeconómico se deteriore.
En renta variable internacional, ¿en qué zonas o sectores encontráis ahora mejores opciones?
A nivel internacional, encontramos muchas oportunidades en Japón, Corea del Sur y Hong Kong, especialmente en el segmento de empresas de pequeña capitalización, que creemos que es más ineficiente. También trabajamos cada vez más en sectores cíclicos como las materias primas y los bancos. La opinión más contraria que tenemos es la infraponderación de la renta variable estadounidense. Seguimos de cerca el índice de PER Shiller y las valoraciones son casi un 100% más altas que la media histórica, por lo que una reversión a la media parece razonable. Gracias a nuestra flexibilidad geográfica, preferimos invertir en Asia antes que en Estados Unidos.