Los valores tecnológicos son uno de los activos más atractivos del mercado, pero también con las valoraciones más altas. En esta entrevista, los gestores de cartera de tecnología global Alison Porter, Graeme Clark y Richard Clode explican las razones de su visión optimista sobre sobre ellos y comparten su previsión para el segundo semestre de 2018.
¿Cómo se han comportado los valores tecnológicos en lo que llevamos de año?
En consonancia con la ampliación de los mercados de renta variable globales, hemos visto cómo los precios de las acciones tecnológicas han vuelto a fluctuar a niveles más normalizados en lo que llevamos de año. Sin embargo, en un contexto de escalada del proteccionismo en el ámbito del comercio, cacofonía reguladora «in crescendo», inquietud por las flojas ventas de iPhone X y la fiebre de las criptomonedas, la tecnología ha seguido batiendo al conjunto de la renta variable en horizontes más lejanos y en el año hasta la fecha*.
Las perspectivas de las compañías tecnológicas siguen siendo sólidas a pesar de las dudas albergadas por los inversores, dadas las tendencias a largo plazo intactas y el impulso coyuntural propinado por la reforma fiscal estadounidense, que ha animado a las empresas a dedicar un mayor presupuesto a gastos empresariales de TI.
¿Ha cambiado su previsión para el resto del año?
La capacidad de las compañías tecnológicas para generar beneficios sustanciales e invertir cuantiosamente en investigación y desarrollo, innovar y trastocar sectores, permanece prácticamente intacta. Informes recientes sobre beneficios empresariales ponen de manifiesto la mayor rapidez con que se está adoptando la nube (computación y almacenamiento a gran escala industrial que permite obtener una potencia informática barata y rápida, así como acceso al aprendizaje automático) y servicios de inteligencia artificial (IA) como Amazon Alexa. También se evidenció en recientes análisis de empresas el resurgimiento del gasto empresarial en TI con las mejores condiciones desde hace una década. Esto brinda un sólido entorno a las compañías tecnológicas cuando tanto las áreas de tecnología nuevas como antiguas se asientan en bases firmes al experimentar una aceleración del crecimiento.
Aunque el creciente proteccionismo hasta la fecha se ha mantenido a raya y no ha trastocado excesivamente la cadena de suministro global de la tecnología, debemos estar alerta ante una posible escalada futura. La preocupación en torno a la normativa sigue siendo elevada, pero esto no es nada nuevo, como prueba la reciente adopción del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) en la Unión Europea tras cuatro años de deliberaciones. Esto ofrecerá a los consumidores una mayor protección de sus datos y transparencia en su privacidad, una adopción para la cual las grandes empresas de tecnología parecen bien preparadas.
¿Dónde encuentra las oportunidades de inversión más interesantes?
Creemos que la inteligencia artificial constituye el próximo cambio de paradigma en el sector de la tecnología, y aunque aún se encuentra incipiente y sobrevalorada en algunas áreas, la IA permitirá que la tecnología trastoque un conjunto mucho más amplio de industrias relacionadas con las principales plataformas informáticas anteriores, como Internet. La nube está acelerando el proceso de adopción de la IA al democratizar la nueva tecnología y ofrecerla a la sociedad como un servicio a bajo coste. Esta habilidad para arrebatar cuota de mercado a un grupo de industrias más amplio, unido al gasto tecnológico que se precisa para desarrollar la infraestructura de nueva generación que respalde los servicios en la nube y la IA, brinda a las compañías tecnológicas un entorno propicio a largo plazo.
Con el cuantioso capital que confluye hacia el sector de tecnología, tanto privado como público, debemos mantenernos alerta sobre las cotizaciones y la sobreexpectación, para no confundir el crecimiento coyuntural dependiente del ciclo económico con el crecimiento secular a largo plazo, habida cuenta de la boyante economía mundial. Esto puede ser un problema para carteras con una temática muy específica. Nuestro mandato de tecnología más amplio y la experiencia integral que poseen los gestores de fondos que trabajan en nuestro equipo nos permiten sortear mejor el ciclo de sobreexpectación en nuestro empeño por invertir en las tecnologías adecuadas, en el momento correcto y a los precios adecuados.
*Fuente: Thomson Reuters Datastream, MSCI ACWI Information Technology Index frente al MSCI World Index a 10 años y en lo que va de año hasta el 30 de abril de 2018. Tenga en cuenta que las rentabilidades pasadas no son indicativas de rentabilidades futuras.