Al final del año 2015, el tamaño del mercado de acciones y bonos en China había alcanzado 53.100 millones y 36.800 millones de renminbis respectivamente, con activos gestionados de 8.400 millones de renminbis en el mercado de fondos.
Con la liberalización del mercado de capitales de China a través de medios como el RQFII (Inversor Institucional Extranjero Calificado en Renminbi), Stock Connect (canal de inversión que conecta las bolsas de valores de Shanghái y Hong Kong) y fondos mutuos, hay una creciente demanda por productos de inversión y referencias que cubran el mercado completo de acciones, tanto doméstico como offshore. En respuesta a esta demanda, S&P DJI ha presentado el S&P China 500 Index, que cubre tanto acciones de clase A, como cotizaciones offshore en Hong Kong y Estados Unidos.
Priscilla Luky Liyu Zeng, de S&P Dow Jones Indices, destacan que aunque la mayoría de las empresas chinas están cotizadas en bolsas nacionales, las acciones cotizadas offshore han llegado a representar hasta el 30% del mercado total desde 2007 y han ganado atracción entre los inversores globales restringidos de invertir en el mercado doméstico.
Históricamente, el nuevo índice soporta menos volatilidad que otros índices de China debido a la mayor diversificación en sectores y monedas. Así, el mercado total de China, representado por el S&P China 500, proporciona más diversificación que el mercado doméstico aisladamente, que presenta el S&P China A 300. Además de otras diferencias entre ambos índices, el sector financiero, por ejemplo, representa el 37% del S&P China A 300, mientras que sólo supone el 27% del S&P China 500. Por su parte, el sector de tecnologías de la información representa el 16% del S&P China 500 Index, en comparación con el 8% en el S&P China A 300.