Los sólidos resultados de los bancos españoles durante el primer trimestre apuntan a que las entidades deberían ser capaces de aguantar el aumento del riesgo para 2020. Sobre todo, gracias a los beneficios antes de provisiones. No obstante, según el último informe sobre la situación de los bancos nacionales con el COVID-19, la incertidumbre sigue siendo acusada y el riesgo a una contracción económica más profunda se mantiene, explica un análisis de Scope Ratings.
Gracias al fuerte desempeño de los bancos españoles en enero y febrero, antes del confinamiento sanitario, han publicado sólidos resultados durante el primer trimestre, dice el informe.
Asimismo, subraya que se ha producido una leve erosión del capital. “Algunos bancos sufrieron cierta erosión en sus ratios de capital, principalmente debido a la caída del mercado en marzo y la consiguiente rebaja de los valores de renta variable y de deuda”. Sin embargo, aún permanecen cómodamente por encima de los requisitos, especialmente después de tener en cuenta la flexibilidad en la composición de P2R.
Por otro lado, la calificadora de rating destaca que las tendencias de calidad de los activos se han mantenido positivas, con descensos secuenciales en los índices de morosidad y los índices de cobertura informados, impulsados por los esfuerzos de aprovisionamiento. “Ya en el primer trimestre, los bancos españoles comenzaron a reservar provisiones, desde los 35 puntos básicos sobre la cartera crediticia en Unicaja a los 141 puntos básicos en BBVA, en previsión de un empeoramiento de la tendencia y mayores pérdidas bajo la NIIF 9”, añade el informe.
Además, las entidades bancarias también comunicaron sus expectativas para el coste de riesgo 2020, en un rango de 50 a 100 puntos básicos para la mayoría de los bancos. “Teniendo en cuenta la impopularidad actual de los dividendos y las recompras entre los supervisores, esperamos que los bancos utilicen los beneficios para proteger sus niveles de capital”, aseguran en Scope Ratings.
Por ello, los datos del informe apuntan a que las ganancias previas a la provisión deberían poder absorber pérdidas este año. “Anticipamos que los bancos podrán absorber estas provisiones fuera de la rentabilidad ordinaria, manteniendo resultados positivos para el resto del año”, destaca la firma. Así, desde Scope Ratings consideran que los bancos españoles entran en esta crisis desde una posición de fortaleza y una rentabilidad previa a la provisión que supera el 1% de los préstamos, con pocas excepciones.
No obstante, puesto que las estimaciones de coste de riesgo de los bancos se basan en una recesión aguda pero corta, advierten de que un segundo confinamiento en la segunda mitad de 2020 profundizaría y alargaría la recesión y probablemente llevaría a aumentos en términos de coste del riesgo en las entidades financieras.