En su último Global Network News correspondiente a abril, Natixis examina la presión de las materias primas y las divisas, la desaceleración económica y las reformas estructurales que han generado una divergencia en los mercados emergentes en meses recientes.
El documento, que lleva por título, “Navegando los caminos divergentes de los mercados emergentes”, incluye las perspectivas de la firma sobre la transición que viven los mercados emergentes.
“Las presiones de las materias primas y las divisas, la desaceleración económica y las reformas estructurales han creado una divergencia en los países emergentes en meses recientes. Lo que acentúa el hecho de que no todas las inversiones en economías emergentes son iguales”, afirma David Lafferty, estratega en jefe de Mercados de Natixis Global Asset Management.
El experto de Natixis explica que la naturaleza de las inversiones en mercados emergentes se ha modificado significativamente desde la crisis financiera. Durante casi toda la década del 2000, cuenta Lafferty, el desempeño de los mercados emergentes se vio impulsado por varios factores comunes, incluyendo niveles de crecimiento de doble dígito o casi doble dígito, que fortalecieron sus divisas locales y aumentaron las exportaciones, en un momento que coincidió con el repunte de la demanda por materias primas. Actualmente, dichos factores ya no dominan el panorama de los emergentes, estima.
El pronóstico de Natixis GAM para el crecimiento del PIB en los mercados emergentes actualmente se sitúa entre el 4 y el 5%. “La fuerte demanda de las materias primas se ha colapsado y la mayoría de las divisas emergentes están bajo presión debido a la expectativa de una política monetaria más estricta en EE.UU. Ante la falta de estos temas macroeconómicos, cada país cotiza ahora con base en sus propios fundamentales, y no como parte de una clase de activos homogénea”, sostiene el estratega en jefe de Natixis GAM.
Por ello, resume el experto de la firma, podemos esperar que el destino de cada país sea divergente debido a las diferencias en tasas de interés e inflación, niveles de ahorro interno, posición actual de la cuenta corriente y dependencia en las materias primas. “A medida que el desempeño se vuelve divergente, la seguridad y la selección de país y divisa se volverá cada vez más importante”, afirma Lafferty.
México e India, entre los favoritos
En cuanto a mercados específicos, Natixis prefiere ahora mismo México y la India. El análisis de la gestora revela que México es cada vez más competitivo gracias a las reformas estructurales en sectores como energía y educación, y que sus costes de producción se vuelven más favorables si se comparan con los altos costes de la mano de obra en Asia. Además, se beneficia de su proximidad con la economía estadounidense que mejora gradualmente.
En lo que respecta a la India, sus reformas han sido lentas, pero los intentos del primer ministro Modi de acabar con la corrupción reducir los subsidios agrícolas y hacer que el sector industrial sea más competitivo, están dando sus frutos.
«En este clima de volatilidad en divisas y materias primas, la visión de administradores de portafolio con experiencia podrá ser de mucho valor para los inversionistas», concluye.