Tras un año complicado, lleno de altibajos en las bolsas y dominado por las incertidumbres, Mirabaud AM mira a 2016 con optimismo. La gestora cree firmemente que durante el próximo año, la economía global seguirá con su ciclo económico de recuperación. «Observamos un ligero repunte en la recuperación de las economías desarrolladas, lo que nos lleva a pensar que el crecimiento ha vuelto, aunque sea de forma moderada», explicaba Gero Jung, economista jefe de Mirabaud AM, en una reciente presentación en Madrid.
Sin embargo, estima Jung, las vulnerabilidades de los países emergentes continúan estando en el horizonte y llevan a Mirabaud a aconsejar cautela en estos mercados. Si el año pasado la firma colocaba a los emergentes un semáforo ámbar en base a los indicadores financieros y los datos macro poco favorables, este año el equipo prefiere asignar directamente un semáforo rojo, que deja claro que el riesgo en los emergentes ha ido en aumento.
De cara a 2016, “la alta correlación de activos será un posible amplificador de la volatilidad del mercado, un efecto surgido a raíz de la crisis”, advierte Jung.
En lo que respecta a las economías de Europa y Japón, la política monetaria y fiscal van a jugar a favor, por lo que la gestora sitúa la renta variable de estos dos países entre sus activos favoritos para asignar parte de la cartera. Para el economista jefe de Mirabaud AM, parece bastante razonable pensar que las políticas monetarias del BCE y del Banco de Japón seguirán siendo muy expansivas el próximo año. En Japón, los indicadores financieros también explican que la gestora sobrepondere las acciones del país.
Con respecto a las bolsas, la gestora también es positiva con Suiza, aunque los indicadores financieros, los datos macro y las política monetaria y fiscal se mantienen como en el pasado.
Si en Europa y Japón los bancos centrales serán acomodaticios, en Estados Unidos vaticina lo contrario. Tras la primera subida de tipos de interés en nueve años, la Fed endureció en diciembre su política monetaria iniciando el camino de la recuperación. Como siempre, el S&P 500 puede dar la sorpresa, pero Mirabaud estima que gran parte de la subida de las bolsas ha quedado atrás y en adelante extraer valor en la renta variable estadounidense va a ser complicado.
En renta fija, las previsiones son poco halagüeñas. Solo la deuda corporativa y high yield de Europa tienen semáforo ámbar en las previsiones de la firma; la deuda estadounidense y la suiza tienen luz roja para la gestora. En divisas, sus apuestas se centran en la evolución del dólar frente al yen y el franco suizo, sobre todo ante la evolución de los datos macro y las políticas monetarias en esas regiones.