No es de extrañar que Miami, con su sol, sus playas y su potente sector financiero haya sido elegida por CareerBliss como la mejor ciudad de Estados Unidos para trabajar. La conocida página de empleo, que ha realizado un análisis en base a ocho variables, sitúa la ciudad más importante de Florida en el número uno del ranking, por delante de otras ciudades como Sacramento, Washington o Las Vegas. No sorprende tampoco que en este top 10 aparezca otra ciudad de Florida: Orlando se coloca en el puesto número 4.
Los factores estudiados por CareerBliss van desde la satisfacción del empleado, incluido el equilibrio entre la vida laboral, a la relación de un empleado con su jefe y compañeros de trabajo, el ambiente general de trabajo, la remuneración, las oportunidades de progreso, la cultura de la empresa, o los recursos.
«Estamos viendo los comienzos de una cultura de start-up en Miami«, explicó Heidi Golledge, CEO y co-fundador de CareerBliss, a la revista Fortune. «Cada vez más startups se están aventurando fuera de Silicon Valley y generando nuevas oportunidades en ciudades de todo el país. Aún es más alentador que las empresas más tradicionales están evolucionando y añadiendo cambios positivos a los lugares de trabajo tradicionales «, declaró Golledge.
Precisamente el equilibrio entre un buen entorno de trabajo y las posibilidades de entretenimiento fuera de él parecen ser las principales claves para la felicidad de los empleados de una compañía. Viendo la lista, se puede deducir claramente que el clima de una ciudad es determinante. No en vano, las peores ciudades para desarrollar una carrera profesional son aquellas donde el invierno es más crudo.
Cleveland, en Ohio, es la ciudad que peor nota saca de todo Estados Unidos. Le siguen Indianapolis, Kansas City y Salt Lake City, en el estado de Utah.