El equipo de multiactivos de M&G considera que 2016 no ha sido tanto un año de “aprender nuevas lecciones, como de recordar algunas de nuestras reglas claves para invertir”: evitar quedarse atrapado en el corto plazo, no perder el tiempo en la predicción, y tener cuidado con las suposiciones perezosas sobre lo que «debe» suceder sobre la base de la experiencia previa.
En su documento “A pivotal moment – looking towards 2017”, la gestora dice que «El Brexit y la victoria de Trump fueron sorpresas, pero incluso si hubiésemos podido predecir los resultados, las fluctuaciones en los precios de las acciones fueron muy diferentes a la visión de consenso. Tras el Brexit, los mercados repuntaron rápidamente tras experimentar inicialmente ventas masivas y la volatilidad provocada por aversión al riesgo que se esperaba tras la victoria de Trump nunca se materializó. Creemos que esto demuestra que es más importante centrarse en los hechos que podemos conocer hoy sobre las valoraciones y el contexto de fundamentales económicos que intentar predecir cómo interpretará el mercado los acontecimientos geopolíticos».
Además, el equipo considera que hemos llegado a un momento crucial y potencialmente crítico en el que es necesario que los inversores cambien su forma de pensar y actuar. Es posible que las estrategias que han arrojado buenos resultados en la última década se enfrenten ahora a dificultades, avisan. Por este motivo, de cara al próximo año y más adelante, “no trataremos de predecir qué acontecimientos protagonizarán los titulares, sino de estar preparados para responder a los cambios en la confianza del mercado«.
En su opinión, parece que el mercado está descontando un entorno más favorable, con un aumento de los beneficios en todo el mundo y una tendencia positiva en datos como los índices PMI y la tasa de empleo en ciertas regiones. Asimismo, parece que la inflación se está recuperando y hemos asistido a una gran variación en los puntos de equilibrio.
Aunque puede que el conjunto de la renta variable no cuente con unas valoraciones tan interesantes como a principios de año, aseguran que todavía quedan buenas oportunidades a escala sectorial y regional. El equipo prioriza con firmeza Europa y Asia (incluido Japón), así como el sector bancario estadounidense. Asimismo, concluye, en el universo de renta fija existen multitud de oportunidades interesantes en las áreas menos convencionales de la deuda pública y la deuda corporativa.