El movimiento sorpresa de Japón introduciendo tipos de interés negativos tendrá poco impacto económico, pero es una gran noticia para su batalla contra la deflación y fue celebrado por los inversores, afirma el economista jefe de Robeco, Léon Cornelissen.
El Banco de Japón decidió este viernes seguir el ejemplo del Banco Central Europeo y establecer un tipo del -0,1%para los depósitos de las entidades financieras, aunque se ha adoptado un sistema de tres niveles más complejo. Esto significa que los bancos pagan por dejar un exceso de fondos en el banco central, animándoles a prestarlo en su lugar.
La bolsa japonesa se recuperó con la noticia, mientras que el tipo de los bonos del gobierno japonés se redujo en 10 puntos básicos y el yen cayó bruscamente frente a otras monedas. Japón ha empujado al yen a depreciarse, ya que una moneda devaluada ayuda a sus exportadores, al tiempo que hace las importaciones más caras y de ese modo, obtiene la inflación que tanto necesita.
La medida tendrá repercusiones en otros bancos centrales a la hora de establecer sus propias políticas de tipos de interés, dice Cornelissen. “Es básicamente un movimiento contundente para devaluar el yen y hacer subir el Nikkei”, afirma. “El impacto económico material de estas medidas es limitado, pero los mercados subieron de todos modos. El yen, considerado un ‘refugio seguro’, se dio la vuelta y el tipo de cambio dólar/yen se sitúa al mismo nivel en el que estaba el año pasado”, cuenta el gestor.
La medida hará más fácil al BCE reducir el tipo de interés en su próxima reunión, cree Cornelissen, y más difícil para la Reserva Federal de Estados Unidos subir los tipos. La Fed dijo el miércoles que había pulsado el botón de ‘pausa’, pero que había tenido la clara intención de elevar los tipos aún más. Sin embargo, “esta decisión del Banco de Japón lo hace más difícil.
Impacto psicológico
«Así que el impacto psicológico es alto. Los mercados fueron tomados por sorpresa ya que hace ya ocho días, el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, dijo ante el parlamento japonés que no estaba pensando en la introducción de tipos de interés negativos, pero ocho días más tarde lo hizo, y se une así al club de tipos de interés negativos de la zona euro, con Dinamarca, Suecia y Suiza».
Cornelissen explica que el panorama económico subyacente en Japón sigue siendo débil, y la amenaza que el país que más teme – la deflación – está despertando de nuevo. La predicción del banco central sobre cuándo alcanzará su meta de inflación del 2% se pospuso al tercer trimestre de 2017, lo que indica que el país está luchando para crear subidas de precios.
Las noticias macro no han sido buenas
“Hemos tenido un montón de cifras económicas muy negativas procedentes de Japón, por lo que las noticias macro no ha sido buenas», dice. La economía japonesa parecía estar haciéndolo bien, porque teníamos una revisión al alza del PIB del tercer trimestre, pero si nos fijamos en los datos más recientes, la producción industrial en diciembre cae un 1,6% y el gasto total de los hogares cae un 4,4 %».
“Por supuesto que éstos son índices de volatilidad, pero se puede argumentar que la primera estimación de las cifras del PIB sugiere una recesión técnica, y luego vemos una enorme reversión positiva de estas cifras. Entonces, ¿podemos confiar en esas cifras? Tenemos que ser escépticos porque estas revisiones nos hacen ser reacios a confiar en ellos, y la noticia económica más reciente es claramente negativa”.
“Japón está de nuevo al borde de la deflación por el impacto del precio del petróleo, y el Banco de Japón otra vez ha ajustado su previsión de inflación, diciendo que alcanzará su objetivo del 2% en el segundo semestre de 2017. Todavía somos escépticos sobre esto nuevo pronóstico”.
Cornelissen afirma que la desaceleración económica china es otra preocupación para las autoridades japonesas, y los datos económicos serán poco fiables debido el período de vacaciones del Año Nuevo Chino, por lo que hará el pronóstico más difícil.
Resurgen los temores sobre China
“Lo interesante fue que en su declaración mencionara sin rodeos a China como uno de sus riesgos», dice. «Es muy raro que los bancos centrales señalen de esta manera, pero apuntó hacia China, y por supuesto es realista, ya que todos vemos un debilitamiento cíclico de la economía china. Y con las turbulencias del mercado, está claro que el Banco de Japón quería enviar una señal positiva”.
“Estamos entrando en el Año Nuevo Chino, así que vamos a perder de vista la evolución de la economía china debido a que todos los datos serán distorsionados por un tiempo debido a las celebraciones – siempre es una pesadilla para los estadísticos”.
En la cartera de renta variable internacional, Robeco Investment Solutions está sobreponderada en Japón. “Obviamente vamos a continuar con esta estrategia. Nuestra posición se ha visto reforzada por la decision del Banco de Japón”, afirma Cornelissen.