En un intento de enfriar la inflación en el país, el Banco Central de Brasil (BCB) tomó la decisión esta semana de levantar los tipos de interés bruscamente. Esta semana, la entidad elevó la tasa de referencia Selic en un punto porcentual, hasta 5,25%.
El aumento es abrupto pero no inesperado. Pese a ser la mayor subida desde 2003, la decisión del ente rector estaba en línea con las expectativas del mercado. Según Reuters, calzó con el consenso de 37 de un total de 46 economistas consultados por la agencia.
La reacción en los mercados fue contenida. El tipo de cambio, de hecho, subió de 5,18 reales por dólar a un máximo intradiario de 5,27 reales en la mañana de la decisión del BCB, pero finalmente cerró en 5,20, con escasos cambios. Actualmente se encuentra en torno a ese valor.
Visiones del mercado
“Los mercados financieros han estado esperando la subida de tipos, mientras que las principales preocupaciones para el país siguen estando en las amenazas de Covid-19, debido a la variante Delta, y el ruido político cada vez más fuerte”, escribió en una nota a clientes Leonardo Pellandini, del equipo de Equity Strategy Research del banco de inversiones Julius Baer.
Los inversionistas, según señalan agentes del mercado, entendieron el mensaje de aceleración del retiro de estímulo monetario. “Si bien el BCB aún enfrenta un gran desafío de credibilidad en su compromiso de estabilidad de precios, el mercado ha captado con claridad las señales de ajuste del banco en los próximos meses”, comenta Olivia Álvarez, analista de Monex Europe.
El tipo de interés implícito por los mercados de dinero a futuro muestran expectativas de un aumento de 132 puntos base en la tasa Selic en un mes más, y hasta cerca de 10% en el horizonte de un año, según indicó un análisis de la firma de cambios. “Si bien los mercados pueden estar descontando una senda de ajuste mucho más agresiva de lo señalada por el banco, el sesgo alcista de la política monetaria brasileña es ya un hecho”, comenta la analista.
Por su parte, en Credicorp Capital destacan los cambios del forward guidance que se anunciaron en el central brasileño, con lo que señalaron que podría ser apropiado un ciclo de ajustes que lleven a la tasa Selic “por encima de su nivel neutral”, destacó la firma en un informe reciente.
“La comunicación respalda entonces nuestra proyección de una senda de normalización de la política monetaria que ubicaría la tasa en 7,5% como punto terminal, nivel que podría alcanzarse este año”, recalcaron.
Factor político
De todos modos, el factor político se ve como relevante para el futuro cercano, con los brasileños preparándose para elegir presidente y parlamentarios en octubre del próximo año.
“La incertidumbre política también está jugando un papel clave en la volatilidad de los mercados financieros, con el expresidente Lula da Silva ahora visto como el claro favorito para las elecciones presidenciales de 2022 y con los intentos de Jair Bolsonaro de revisar la agenda económica con reformas tributarias y propuestas de gasto social, este último planteando un problema”, destacó Pellandini, de Julius Baer.
Desde Bank of America también destacan el rol que ha tenido el “ruido político” en los mercados brasileños, pese a los esfuerzos recientes del gobierno encabezado por Bolsonaro de hacer reformas estructurales en el país.
“Otro factor que podría estar afectando a los flujos de capital al país es la elección presidencial del próximo año. Aunque se va a llevar a cabo en octubre de 2022, los inversionistas ya están hablando de sus posibles impactos”, indicó la firma estadounidense en un informe esta semana.