La búsqueda de alternativas de inversión a un mercado de deuda que afronta desafíos pasa por oportunidades en high yield, o en diferentes estrategias multiactivo que aporten valor al inversor. Un inversor que, según Beltrán de la Lastra, director de inversiones de Bestinver, “está secuestrado”. Pero parece que las ventanas están abiertas también a la renta variable, o al menos a parte de ella. “Es el único activo que puede proporcionar una alternativa interesante”, explicó De la Lastra.
En la jornada “Alternatives in Fixed Income & Flexible Investing” organizada por Kessler & Casadevall recientemente en Madrid, expertos de Generali Investments, Morgan Stanley, Oddo Meriten AM, BMO o Edmond de Rothschild AM presentaron sus diferentes propuestas de inversión en el actual entorno. Pero también los gestores de fondos de autor españoles de Bestinver, Abante y Alpha Plus ofrecieron su visión del mercado y, en este caso, la apuesta fue la renta variable.
Para José Ramón Iturriaga, gestor de Abante, es difícil saber a ciencia cierta dónde se va a estabilizar la curva de tipos de interés en la renta fija: “Creo que tiene algo de continuidad, pero no la vamos a ver como estaba hace unos años con rentabilidades del 5% o el 6%”. Esto nos lleva, en su opinión, a volver la mirada a la renta variable. En el caso de España, “donde no hemos dejado ningún charco por pisar”, con un escenario atractivo de inversión. “Pocas veces en la vida he visto un potencial de revalorización tan grande como veo en ahora mismo en mi cartera”, afirmó Iturriaga.
Los expertos siguen mostrando cierto recelo hacia el sector financiero, pero con diferente grado de entusiasmo. “Pensar que todos los bancos tienen valor es absurdo, hay bancos donde no lo hay, pero hay otros a buen precio teniendo en cuenta el invierno nuclear que están viviendo y sin que tengan que subir los tipos de interés”, explica De la Lastra, tras recordar que Bestinver ha vuelto a incorporar el pasado verano, y por primera vez en muchos años, valores del sector financiero.
Iturriaga, que aseguró que no ha hecho de la caída de los bancos su forma de vida como han hecho otros, cree que la clave no está en la rentabilidad del sector en la actualidad, sino en “hacia dónde va esa rentabilidad en el futuro», con diferenciales que actualmente alcanzan los 200 puntos básicos. Ello sumado, añadió, a una normalización del Euribor de al menos el 0,5% en 2017 o 2018.
En opinión de Gonzalo Lardiés, gestor de Alpha Plus, “lo único que se observa en el sector es algo de normalización, porque la consolidación en España no está finalizada”. A largo plazo, Lardiés reconoció que no le gustan los bancos, “por el exceso de deuda a nivel global además de por los muchos y complicados retos que tiene por delante”.
Recuperación lenta
Los gestores coinciden en señalar una situación paradójica que viven en los últimos tiempos cuando mantienen reuniones con directivos de las compañías. “Cuando me reúno con los directores financieros o CEOs son ellos los que me preguntan cómo veo la situación y no al revés”, afirmó Iturriaga. Un fenómeno que Lardiés calificó de “frustrante”, porque “nadie se moja con sus perspectivas”. En opinión de De la Lastra, “las empresas no acaban de creerse la recuperación a pesar de que les vaya bien”.
Para el director de inversiones de Bestinver, las heridas de la crisis de 2008 son muy profundas y, por lo tanto, la recuperación es lenta y duradera. “Algunas saldrán beneficiadas, pero no todas”, aseguró. En este sentido, los gestores aducen falta de visibilidad, ya que la situación de algunas compañías puede cambiar en dos o tres meses, lo que les deja escasos de argumentos para ciertas inversiones.
Desde Bestinver apuestan por “no intentar heroicidades sino construir carteras robustas” en las que incluyen valores como CAF, Cie Automotive, Miquel i Costas, Indra y algunas socimis. Además de bancos e inmobiliarias, Iturriaga apunta a compañías ligadas al ciclo y, en concreto, al sector hotelero, “cuyo valor no está recogido en los múltiplos actuales”.