Las incertidumbres políticas, especialmente la guerra comercial entre Estados Unidos y China y el Brexit, supusieron un especial desafío en 2019 para los gestores de fondos activos. Sin embargo, según los datos de Lyxor, los resultados en el primer semestre de 2020 muestran que han sido capaces de “navegar mucho mejor por las circunstancias y consecuencias únicas de la pandemia del COVID-19”.
De media, el 53% de los gestores activos de renta variable obtuvieron mejores resultados que sus índices de referencia en el primer semestre de 2020, según el último informe del equipo Lyxor ETF Research de la firma: Active-Passive Navigator. El estudio ofrece un “análisis exhaustivo del rendimiento de los fondos activos domiciliados en la UE en relación con sus índices de referencia, así como una revisión de las tendencias de los mercados mundiales”, según explican desde la gestora.
Así, los gestores activos de pequeña y mediana capitalización mostraron una elevada ratio de éxito en la mayoría de las regiones en comparación con sus índices de referencia (de media, el 70% se comportó mejor). “Como las acciones de pequeña capitalización se vendieron en gran medida durante la crisis del mercado, los gestores exitosos pudieron aprovechar las clara rotaciones dentro del sector”, explica el informe.
Por otro lado, el rendimiento relativo de los gestores de fondos activos de gran capitalización fue más desigual. “Los fondos estadounidenses lucharon, pero los gestores europeos y japoneses sortearon la creciente dispersión de las acciones, reflejando las desiguales respuestas sanitarias y económicas a la pandemia”, destacan.
Así, los gestores activos de renta fija se quedaron rezagados en el primer semestre de 2020, con sólo el 33% de los fondos superando sus índices de referencia. En este sentido, la mayoría de los gestores no lograron mantenerse al día con el estímulo monetario y fiscal récord desatado en el mundo, que ancló los rendimientos a mínimos y provocó subidas en los precios de bonos, según los datos de informe.
“Por convención se dice que los gestores activos tienen como objetivo proteger el rendimiento de la cartera durante los períodos de mayor volatilidad del mercado. De hecho, un número considerable de gestores de renta variable ha podido navegar con éxito por uno de los entornos de mercado más volátiles de la historia reciente. Sin embargo, el resultado para la renta fija ha sido mucho menos convincente. En una ventana de observación más larga, la generación de un alfa sostenible sigue siendo un ejercicio difícil para la mayoría. Un marco sólido de asignación de activos es esencial para determinar los posibles resultados superiores a largo plazo. Los vehículos de inversión pasiva como los ETFs pueden proporcionar anclajes útiles cuando es más difícil encontrar alfa”, añade Vincent Denoiseux, director de ETF Research and Solutions en Lyxor AM.
Los gestores soberanos y flexibles fueron los que más dificultades tuvieron, especialmente los que operaban en los Estados Unidos: sólo el 21% de los fondos soberanos estadounidenses superaron sus índices de referencia. Por otro lado, el informe destaca a los gestores de high yield, en particular aquellos que operaban en euros, con un 51% de rendimiento superior, principalmente gracias a su posicionamiento defensivo general.
“Aunque la corrección del mercado fue particularmente severa en este sector, con la evaporación de la liquidez y unos niveles de volatilidad implícitos que se dispararon hasta sus niveles más altos desde la crisis financiera de 2008, el posicionamiento defensivo de los gestores activos y la reducción del riesgo de cartera justo antes de la corrección del mercado les ayudó a protegerse contra el choque histórico del mercado”, aseguran desde la entidad. Los fondos de deuda en hard currency de los mercados emergentes también mitigaron su rendimiento relativamente bajo, gracias a la creciente dispersión de los precios de los activos, acorde con las desigualdades en términos de vulnerabilidad de los países y de respuestas frente a la pandemia.
Por otro lado, el equipo de análisis de Lyxor ETF también evalúa el rendimiento de los gestores activos durante períodos más largos, basado en un universo constante de fondos. A lo largo de un período continuo de cinco años, tanto los gestores de activos como de renta fija han tenido dificultades para superar sistemáticamente sus índices de referencia (36% y 19%, respectivamente). “Esto subraya la importancia de la asignación dinámica de activos de cartera y de un proceso sólido de selección de fondos”, aseguran desde la firma.
“Después de un primer semestre memorable, los inversores todavía se enfrentan a un entorno atípico, caracterizado por una elevada dispersión de los precios de los activos, valoraciones distorsionadas debido a los estímulos, una menor previsibilidad fiscal y política, y las dificultades de cobertura de la cartera cuando los rendimientos están anclados”, subraya Jean-Baptiste Berthon, estratega senior de Cross-Asset de Lyxor AM.
Berthon explica que, mientras tanto, el ciclo económico probablemente necesitará nuevos catalizadores, algunos de los cuales ya están despegando. En este contexto, además, será fundamental buscar la diversificación y otras fuentes de rendimiento. “Una combinación ágil de estrategias activas y pasivas podría ser la mejor opción para beneficiarse tanto de la creciente diferenciación de activos como de las promesas de temáticas seculares como la energía limpia, los millenials y el futuro del trabajo”, añade.