El impulso en la volatilidad originado a raíz de las elecciones estadounidenses ha sido objeto de debate y análisis por parte de las gestoras de activos, que tratan de adivinar las implicaciones que Donald Trump provocará en los mercados. Para unos, el mercado estadounidense no está descontando esa mayor incertidumbre y las valoraciones son excesivas. Para otros, los datos a nivel doméstico habían sido muy fuertes antes de las elecciones pero el mercado no lo cotizó al estar la votación por medio y ha sido después de tener un presidente que los mercados han celebrado el buen comportamiento de la economía y el fin de la incertidumbre respecto de quién saldría elegido.
La tercera visión es que, fuese como fuese, tanto los fuertes datos macro como las medidas que supuestamente va a impulsar la nueva administración son inflacionistas. Tras el debate en su equipo gestor, en Lord Abbett la opinión que ha imperado es la de que efectivamente habrá más inflación.
Según explicó Kewjin Yuoh, gestor del fondo americano de Lord Abbett Short Duration Income, en una reciente presentación en Madrid, a la subida de tipos de diciembre probablemente le seguirán otras dos en 2017. Por ello, en la gestora están observando la evolución de los TIPS, por si conviene incorporarlos a la cartera en algún momento. También creen que hay que aminorar el riesgo, reduciendo el spread duration de la cartera con respecto al índice.
La cartera del fondo de renta fija mencionado se centra en vencimientos cortos, de forma que cada mes les vence en torno a un 3%, lo cual les permite cambiar el posicionamiento de una manera fácil ante los acontecimientos de mercado.
Un fondo con sesgo hacia grado de inversión
El fondo tiene como objetivo ofrecer una rentabilidad superior a una estrategia tradicional de duración corta pero con menos duración que una estrategia core de renta fija. Es un fondo muy estable, con volatilidad 1,5% en los últimos tres años si utilizamos el histórico del fondo americano y con un retorno anualizado en ese período del 2,98%.
A diferencia de otros fondos americanos en duraciones cortas, éste tiene un sesgo hacia grado de inversión (mínimo de un 65%), por lo que se parte de una cartera con menos riesgo de crédito y menos sensible a los cambios en los tipos de interés (la duración es de dos años). Sin embargo, es un fondo flexible, porque puede moverse entre los distintos segmentos del crédito buscando incrementar el retorno para el inversor. Además, también se controla el spread duration, por lo que el inversor ve también limitado el riesgo desde un punto de vista crediticio.
La gestión activa es uno de los puntos fuertes del vehículo: un 58% de la cartera no coincide con el benchmark.
El proceso de inversión del fondo combina el análisis top down con bottom-up, utilizando una mezcla de análisis cuantitativo y por fundamentales. El proceso comienza con el entendimiento de las condiciones económicas y financieras para entender las oportunidades y riesgos que existen para cada sector (por ejemplo el de CMBS). La selección de los distintos sectores de renta fija está también informado por un modelo propio fundamentado en una base de datos histórica de las relaciones intersectoriales de los spreads. El modelo no es una caja negra que se sigue sin ser cuestionada, pero permite tener una primera recomendación respecto a la asignación a los distintos subsectores: grado de inversión, high yield, CMBS, ABS, préstamos…, dentro de las restricciones y reglas del fondo.
Con el modelo propio de valoración relativa de Lord Abbett, pueden hacer un screening de 11.000 valores que tienen en su universo de inversión y determinar por emisión, emisor, mercados (desarrollado o emergente), industria y sector, el ratio spread -el spread de mercado dividido por el spread que dicta el modelo para ese rating y vencimiento-. Si es superior a 1 está infravalorado y eso da un «aviso» al equipo de análisis y gestión para hacer un estudio más detallado de sus fundamentales. Una vez identificado un spread excesivo se pasa al análisis fundamental. Para la selección de valores, principal fuente de valor del fondo, se aplica el análisis fundamental del crédito. Se cubren las industrias (por ejemplo petroleras) y así el analista puede tener una idea de las tendencias a lo largo de sector y cómo afectan a las empresas y tener una visión para toda la estructura de capital de cada compañía. Por último, el modelo de gestión de riesgos monitoriza la volatilidad de los spreads y limita las posiciones por emisión, emisor, industria y sector. Eso permite que se controle que cuando hay un movimiento de dos desviaciones típicas respecto a la media, el impacto en la cartera no sea superior a 10 puntos básicos.
El equipo gestor está formado por Robert A. Lee, CIO y socio (con 25 años de experiencia), Kewjin Yuoh, socio y gestor de productos titulizados y líquidos (con 22 años de experiencia), Andrew H. O’Brien, CFA, socio y gestor de bonos corporativos (con 18 años de experiencia) y Steven Rocco, CFA, socio y gestor de high yield (con 15 años de experiencia), Jeffrey D. Lapin JD., socio y gestor de préstamos bancarios (con 19 años de experiencia) y Alan Kurt, gestor de convertibles (con 16 años de experiencia). Trabajan en colaboración y consenso y se apoyan en un equipo de análisis con 22 analistas liderados por Gregory F. Parker, CFA y con 25 años de experiencia, y un equipo de trading de 10 personas liderado por Andrew M. Khatri, socio también con 14 años de experiencia. Como recursos adicionales, Walter H Praha, Ph.D, socio y director de Análisis cuantitativo con 31 años de experiencia ha elaborado el modelo propio de gestión de riesgos.