Latinoamérica ha vivido grandes avances en las últimas dos décadas pero aún se enfrenta a importantes retos. Así lo ha declarado esta mañana Antonio Zoido, presidente de BME, con ocasión de la inauguración del 20º Foro Latibex, cuyo objetivo ha sido siempre tender puentes entre empresas e inversores, mejorar el conocimiento del ahorrador europeo sobre la región y ofrecer un entorno para que las compañías e inversores de ambos continentes pudieran encontrarse.
Sobre los logros, destacó que “el PIB se ha duplicado hasta superar los 6.000 billones de dólares americano, la inversión extranjera directa se ha multiplicado por tres -del total, un 41% proviene de Europa y, a su vez, un tercio tiene origen español, con España como primer inversor europeo y el segundo del mundo en Iberoamérica-, los intercambios comerciales de la región con el resto del mundo también se han triplicado en dos décadas, las clases medias han aumentado intensamente -80 millones de personas han abandonado la pobreza en los últimos 20 años, aunque un 25% de la población todavía se encuentra atrapada en ella- y el mayor acceso a la educación ha propiciado un creciente sentido crítico en la población”.
Entre lo conseguido en estos años, también destacó el fenómeno de las multilatinas, unas pymes cada vez más globales, un crecimiento reforzado por la colaboración entre grandes y pequeñas empresas, en entornos de innovación abierta que propician una diversificación sectorial que permitirá ir abandonando el carácter predominante de América Latina como productor de materias primas y manufacturas básicas y un crecimiento más responsable y sostenible.
Los retos
Entre los retos, citó que la mejora en el crecimiento es menor de lo esperado e inferior a la media de los años 2000; la baja productividad, que presenta una brecha del 70% con los países de la OCDE; las exportaciones estancadas -en términos relativos a diferencia de la zona asiática- o una insuficiente integración regional, pues además “siguen pendientes enormes desafíos en infraestructuras, logística, educación o sanidad que permitan reducir las desigualdades sociales”.
Sobre la actualidad, Zoido destacó que el crecimiento está siendo modesto, menor de lo esperado y, según diferentes previsiones, terminará 2018 creciendo entre el 1% y el 2%. Y con perspectivas heterogéneas: “Crisis en Argentina, incertidumbre en Brasil y destacable resiliencia en la Alianza del Pacifico, particularmente en México. La buena noticia es que, después de cinco años de desaceleración y dos de recesión, la recuperación está en marcha”, dijo.
Financiar un desarrollo imprescindible
Para financiar ese desarrollo, que precisa de grandes inversiones, habló del papel de los mercados de valores. “La capacidad de expansión de las empresas se multiplica cuando pueden acceder a nuevos recursos, sobre todo a largo plazo y en particular a financiación de capital. Los países que cuentan con mercados de valores amplios y líquidos pueden ofrecer a sus empresas una palanca de crecimiento decisiva. El desarrollo de las bolsas como herramienta financiadora es básico para los sistemas financieros de la región, sin dejar de mencionar la posibilidad de crear mercados específicamente diseñados para empresas de menor dimensión”, indicó.
Zoidó destacó el crecimiento de los flujos de financiación de las bolsas latinoamericanas a sus empresas en la presente década: “Cinco bolsas principales, las de Brasil, México, Colombia, Perú y Chile, han canalizado flujos de capital por 140.000 millones de dólares en los últimos siete años”.
Pero advirtió de que queda mucho trabajo por hacer para ayudar a equilibrar las fuentes de financiación de las empresas iberoamericanas. “En este desafío de desarrollar los mercados de valores, Latibex ha tomado parte activa desde su creación. Acercar la realidad de las economías latinoamericanas y sus empresas al inversor del euro ha sido la tarea más intensa en estos 20 años”.
Según Zoido, sigue llamando la atención que «la enorme actividad de inversión directa de los países europeos en la región no se corresponda con una inversión de cartera relevante por parte de los gestores de fondos de inversión. Las carteras gestionadas desde Europa están tradicionalmente infraponderadas en valores latinoamericanos”, criticó.
La explicación principal reside en el desconocimiento endémico que el inversor profesional europeo continúa sufriendo respecto a los valores latinoamericanos. A pesar de ello, cuarenta empresas de diez países diferentes han ido cotizando en Latibex, acercándose así a los inversores, participando de los foros y demás actividades divulgativas, y fijando diariamente un precio en euros, explicó el presidente del BME.
“Un grupo destacado de inversores ha tenido la ocasión de construir una cartera razonablemente diversificada sobre la región. Y hay que decir que, desde su inicio y hasta octubre, el Latibex All-Share se ha revalorizado un 143%”.
Proyectos en LatAm
Pero Latibex no es el único proyecto que BME ha desarrollado en Iberoamérica. “En estos años se han implantado por BME diversas plataformas tecnológicas en bolsas latinoamericanas. Entre las más recientes destacan los sistemas de información de mercados y de negociación para la Bolsa de Colombia. Y en México, BME ha añadido a sus servicios de información financiera para la Bolsa Mexicana una iniciativa conjunta para impulsar el negocio de generación, distribución y venta de información de mercados latinoamericanos. A estos proyectos se suman numerosos servicios tecnológicos prestados a entidades financieras en México, Colombia, Costa Rica o Chile, por citar algunos países”, apostilló.