Christine Lagarde, directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), comentó que, pese a «los signos de mejoría, el crecimiento mundial permanece apagado» y señala que a pesar de que las economías avanzadas se encuentran en una posición «mucho mejor» que hace seis meses, el impulso de las economías emergentes se ha «desacelerado».
Durante una conferencia en la Cámara de Comercio de Estados Unidos, la directora dijo que a diferencia del pasado, donde se hablaba de tres velocidades, cada vez más las economías globales «se mueven a diferentes velocidades», con el crecimiento en Estados Unidos repuntando, y la eurozona creciendo, pero con las economías emergentes disminuyendo su crecimiento.
La ex ministra de Finanzas de Francia también destacó la importancia de la interconexión entre las economías mundiales, mencionando que si las cinco principales economías del mundo adoptaran políticas más rigurosas, amplias y compatibles, el PIB mundial podría aumentar en un 3% en el largo plazo.
Por otra parte, Lagarde urgió a la Reserva Federal a calibrar de forma «adecuada» la retirada de los estímulos – que se mantuvieron intactos el pasado miércoles- defendiendo que la salida de las políticas monetarias no convencionales debe ser «gradual», ligada a avances en el crecimiento y el empleo, así como «claramente comunicada».
En sus últimos cálculos, el FMI redujo los pronósticos de crecimiento global al 3,1 % en 2013 y 3,8 % en 2014. Las nuevas previsiones de crecimiento económico mundial serán presentadas a mediados de octubre próximo.