Según el informe sobre la riqueza mundial de 2018, elaborado por el Credit Suisse Research Institute, ésta ha aumentado en 14 billones de dólares, es decir un 4,6%, en el periodo de doce meses hasta mitad de 2018, alcanzando un total de 317 billones de dólares, un incremento superior al crecimiento de la población.
Se prevé que la riqueza mundial crezca en cerca de un 26% en los próximos cinco años, hasta alcanzar los 399 billones de dólares en 2023. Los países emergentes serán responsables del 32% del crecimiento de esta riqueza, aunque en la actualidad representan solo el 21% de la riqueza. El número de millonarios aumentará notablemente en los próximos cinco años, hasta alcanzar un nuevo máximo histórico de 55 millones de dólares.
Según indica el informe, la riqueza por adulto ha aumentado en un 3,2%, elevando la riqueza media mundial a un máximo histórico de 63.100 dólares por adulto. Dentro de este crecimiento, Estados Unidos es la región que más ha contribuido a la riqueza mundial, con un total de 98 billones de dólares, han añadido 6,3 billones de dólares este año y mantienen desde 2008 un ritmo ininterrumpido de crecimiento de riqueza total y de la riqueza por adulto.
En segundo lugar se ubica China, con un total de 52 billones de dólares, al sumar este año 2,3 billones de dólares. De añadirse otros 23 billones de dólares en los próximos cinco años, elevaría su cuota global del 16% en 2018 a algo más del 19% en 2023.
“El informe de este año analiza algunos avances fascinantes. Estados Unidos y China son claramente los que destacan frente a otros países ya que, pese a las crecientes tensiones comerciales, impulsan el crecimiento de la riqueza a nivel global. Gran parte de la variación interanual de los niveles de riqueza puede atribuirse a las fluctuaciones del precio de los activos y de los tipos de cambio, que tuvieron su mayor impacto en América Latina y en algunas partes de la región de Asia y del Pacífico”, explica Michael O’Sullivan, responsable Regional de Inversiones para EMEA IWM (International Wealth Management).
Por su parte, Europa sigue representando una cuota importante de riqueza a nivel mundial y concentra a un tercio de las personas que forman la franja de riqueza más alta del mundo (aquellas con un patrimonio neto superior a 100.000 de dólares) y el 30% de las personas con un alto poder adquisitivo en el mundo. “La evolución estable, aunque poco espectacular, en Europa en el último año se ha visto influenciada por la incertidumbre política y las variaciones de los tipos de cambio, con acontecimientos como el Brexit, que han impactado en un año difícil para Reino Unido”, apunta O’Sullivan.
Género y generación
Otro aspecto de la riqueza sobre la arroja datos importantes este informe es sobre la cuestión del género. Se estima que actualmente las mujeres poseen aproximadamente el 40% del total de la riqueza mundial. Aunque su proporción ha aumentado de manera notable durante el siglo XX, este crecimiento podría haberse estancado desde el 2000. El informe analiza las variaciones a nivel mundial, junto con las diferencias en la composición de la cartera, la aversión al riesgo y el impacto en las mujeres millennials.
Según señala Nannette Hechler-Fayd’herbe, responsable Global de Investment Strategy & Research, “nos complace haber profundizado este año en las perspectivas de la riqueza mundial para las mujeres. Si bien a nivel global sigue habiendo diferencias en la riqueza entre hombres y mujeres, y en algunas regiones esta brecha es mucho más pronunciada que en otras, la diferencia se ha reducido notablemente a lo largo de los años y se espera que continúe haciéndolo a medida que crezca el número de mujeres que tienen acceso a la educación y que participan en el mercado laboral. También hay señales de que hay más mujeres independientes, que están triunfando en los negocios y que acceden a las más altas esferas de la riqueza. Sin embargo, los retos persisten, incluso en los países que más progresan. Es necesario que se lleven a cabo más iniciativas que garanticen que las mujeres tengan las mismas oportunidades de construir, legar y compartir la riqueza”.
Por último, aborda el reparto de la riqueza según la pirámide población. En este sentido, los dos niveles superiores de la pirámide de la riqueza mundial (más de 100.000 dólares), que representan el 9,5% de la población mundial, poseen en conjunto el 84,1% de la riqueza total, un descenso del 86% respecto al año pasado.
Los dos niveles inferiores, que representan el 90,5% de la población mundial, poseen el 15,8% de la riqueza mundial, lo que corresponde a 50,4 billones de dólares, un aumento considerable con respecto a los 40 billones de dólares del año pasado. Esto pone de manifiesto una tendencia hacia la reducción de la brecha de la riqueza mundial.