El tesón de Joe Biden para mejorar el legado de su predecesor en materia social y de salud está dando sus frutos: el aparato sanitario estadounidense está inoculando a más de tres millones de personas al día en media semanal y, con un 32% de la población habiendo recibido ya al menos una dosis, la inmunidad de rebaño podría alcanzarse en EE.UU. en mayo; uno o dos meses más tarde, el grueso de la Unión Europea logrará lo propio.
El avance de la campaña de vacunación, que progresa ya en 84 países, que serán 100 en cuestión de semanas, y lo que implica desde el punto de vista de normalización social y de reactivación económica, quedó de manifiesto la semana pasada con la publicación del dato de nóminas no agrícolas estadounidenses.
Aunque el mercado llevaba semanas anticipando una sorpresa positiva respecto a lo proyectado por el consenso de los economistas (~750K–850K vs 660K), los 916.000 empleos creados en marzo sembraron el asombro entre los inversores; asimismo, la inercia de la recuperación también se vio refrendada al anunciarse el resultado de la encuesta entre gerentes de compras de empresas manufactureras (que conquistaba los 64,7 puntos, cota que no había sido superada desde octubre de 1984) y las ventas de coches ajustadas a estacionalidad (17,75 millones de vehículos que se comparan con los 15,67 millones del mes anterior).
Curiosamente, a pesar de la creciente solidez en el ámbito macroeconómico, la rentabilidad del bono a 10 años ha perdido ímpetu, como apuntábamos en columnas anteriores. Una consolidación a corto plazo, o al menos una moderación en las caídas en precio, es probable; el incremento en rentabilidades y la renovada fortaleza del dólar han tensionado el índice de condiciones financieras, como evidencia el estancamiento desde febrero del benchmark global de acciones (MSCI All Country World Index), el punto de inflexión en permisos para la construcción y aplicaciones hipotecarias en el mercado de vivienda nueva de EE.UU. o más recientemente el auge en margin calls y la liquidación forzada de posiciones en algunos hedge funds que, como Archegos, han acaparado titulares las últimas dos semanas.
En este sentido, cabe destacar que la senadora Warren anunció que la situación de Archegos exige una mayor supervisión y transparencia de los fondos de cobertura.
El plan «Build Back Better« de Biden tendrá que adaptarse para convertirse en ley, ya que algunos senadores dan la bienvenida a los estímulos adicionales, mientras que otros muestran su preocupación por lo que implicaría respecto al déficit y a la necesidad de compensarlo –al menos parcialmente- con subidas más agresivas en impuestos.
Adicionalmente, los demócratas pueden encontrar el escollo más complicado de sortear dentro de su propio partido: los representantes de los estados de Nueva York, Illinois y California entre otros, en contra de los deseos del presidente, han declarado públicamente que condicionan su apoyo al regreso de las deducciones SALT.
La incertidumbre respecto al formato definitivo de esta nueva ronda de estímulos, la pendiente de la curva (2 meses – 10 años) en máximos de los últimos seis años, y el refuerzo -moderado- en producción de crudo acordado por la OPEP+ juegan en contra de caídas adicionales en el precio del tesoro EE.UU.
Mientras tanto, la popularidad de las inversiones en bolsa entre minoristas ha disminuido en la medida en que el progreso de la campaña de vacunación permite a los estadounidenses volver a entretenerse viajando, yendo al cine o asistiendo al recital de su banda de rock favorita. Según informaciones publicadas en Financial Times, el apetito por los penny stocks, micro caps o “meme stocks” se habría moderado sustancialmente en las últimas semanas, con una caída del 60% en volumen de compras por parte de individuos desde el pico alcanzado el 29 de enero.
Todo lo anterior apunta a que, en esta ocasión, los cheques de 1.400 dólares otorgados como parte del Plan de Rescate Americano (ARP) serán utilizados más para salir de viaje que para especular. Según ARC, la asociación que aglutina a los consultores y agentes de viajes más reconocidos, las ventas online de billetes de avión son un 29,8% más bajas hoy que en enero de 2020, reflejando una mejora significativa respecto al desplome del 96,3% registrado en abril del año pasado; las búsquedas a través de Google Flights evidencian que las ganas de romper con el confinamiento y salir de vacaciones contrastan con el cansancio en lo que respecta al interés por vehículos de inversión novedosos, trendy que habían correspondido con ganancias generosas (como los Special Acquisition Purpose Vehicles o SPAC) pero que ahora se resienten como consecuencia del mayor coste de oportunidad.
Mientras países como Australia o Nueva Zelanda se preparan para enfrentar una “burbuja de turismo”, en el último mercado de moda, el de los Non Fungible Tokens o NFTs, empiezan a surgir las dudas. Así, B.20, un token creado por Vignesh Sundaresan -conocido como MetaKovan y célebre por haber pagado recientemente 69 millones de dólares por la obra virtual «Everydays: The First 5,000 days«- que incluye algunas de las creaciones de Beeple, ha caído hasta los 5,5 dólares desde el máximo de 23 dólares alcanzados tras la subasta en Christie’s de “Everydays” el pasado 11 de marzo.
Todo ello a pesar de campañas de publicidad como la de Robinhood, que bonifica generosamente las nuevas aportaciones, y que resume este tweet de wallstreetbets.
Y aunque la atención de los inversores amateur se gire puntualmente, la mayor relevancia adquirida los últimos meses volverá a hacerse notar en el futuro y en esta ocasión el foco puede situarse sobre las acciones de empresas relacionadas con el ocio y el turismo. Como muestra la gráfica, la demanda diferida/acumulada en este segmento de la economía brinda un margen de mejora considerable y el contexto más constructivo para hacer negocio.
Como no podía ser de otra manera, compañías como Delta Airlines, United, Southwest o American AIrlines ya se frotan las manos y se apresuran a rescatar a miles de pilotos en baja temporal para poder dar abasto a la demanda que se avecina.