El mercado mundial de cannabis legal está valorado actualmente en más de 340.000 millones de dólares. Se trata de un sector que ha captado la atención de numerosos inversores que ven en los cambios regulatorios a favor de su consumo de forma ordenada y legislada una oportunidad de inversión. Pese a estar prohibido en casi todo el mundo, 263 millones de personas lo consumen.
Estos fueron algunos de los datos que se compartieron durante el debate entorno a este producto, y cómo invertir en él, organizado por la plataforma de mercados financieros Investing.com. Durante el encuentro, Pablo Gil, director de método trading y estratega de mercados en XTB, destacó que “cada vez hay más sectores interesados en la industria de cannabis, compañías de biotecnología, desarrollo financiero, desarrollo a nivel de socimis, alcohol y tabaco”. Desde XTB explican que esta industria vivirá en los próximos años una gran revolución impulsada por los cambios regulatorios que van a crear un marco legal para permitir su consumo a nivel recreativo, pero en especial con fines medicinales.
Aunque más de 50 países en el mundo han legalizado algún tipo de cannabis medicinal, actualmente en España no hay ninguna iniciativa que se esté tramitando y de hecho tan solo existen dos licencias concedidas para su explotación en el ámbito del desarrollo de medicamentos. Según explica Bernardo Soriano, consejero delegado y cofundador de S&F Abogados, en nuestro país “la regulación es muy diferente con respecto a la que existe actualmente en Canadá y Estados Unidos. Los únicos productos regulados son fármacos y se regulan y distribuyen desde el sector farmacéutico”.
Los datos de esta industria y su potencial de crecimiento a nivel mundial muestran un sector incipiente con un larga cadena de valor en la que poder invertir, tal y como se tras. Ahora bien, ¿cómo hacerlo?
El primer obstáculo que hay que saltar es el percepción negativa que se tiene. En todo caso, se estaría invirtiendo en el cannabis legal, es decir, que está regulado tanto su uso recreativo como medicinal. “Hay una moral arraigada al tema de las drogas. Cuesta entender por qué ahora se quiere regular algo que estaba vinculado a drogas del nivel de la cocaína o la heroína. Y cambiar esta mentalidad es muy importante”, afirmó Soriano.
En su opinión, este sector está, curiosamente, en auge en España, pese a la ausencia de legislación. “El cannabis medicinal tiene potencial, con más de 200.000 usuarios, pero el de uso recreativo tiene todavía más, alcanzando los cuatro millones de usuarios”, aseguraba Soriano. A nivel Europeo, se estima que estamos ante un mercado de 6.850 millones de dólares.
El vehículo de inversión
En segundo lugar hay que elegir el vehículo de inversión apropiado para invertir. Actualmente existen en el mercado más de 200 acciones de empresas relacionadas con la actividad del cannabis en los mercados internacionales, que suman una capitalización total de 80.000 millones de dólares. “No es fácil meterse en una acción o compañía concreta del sector sin conocer a fondo su funcionamiento. A los inversores nos gusta que nos lo den todo hecho, y por eso hay índices, como el BITA Global Cannabis Giants Index (BGCANG) que permite invertir en este sector”, explicó el experto de XTB.
Segúne explica Gil, BITA Global Cannabis Giants Index (BGCANG) es el índice más usado por los inversores. Está formado por 20 compañías de alta capitalización de industrias relacionada con cannabis y marihuana. “Mediante filtros de liquidez, el índice está optimizado para garantizar una ejecución eficiente y está diseñado para replicar el rendimiento de las compañías que obtienen al menos el 50% de sus ingresos de la industria del cannabis y la marihuana medicinal. Tiene un volumen de negociación medio diario de los últimos 90 días debe ser al menos de un millón de dólares”, añadió.
Desde XTB proponen el CFD Uscanna como instrumento para invertir ya que replica este índice. Según advierte Gil, este tipo de inversión está orientada para aquellos inversores que tengan un horizonte a largo plazo y que sean capaces de soportar los movimientos de subidas y bajadas propios de un mercado volátil, pero del que, en su opinión, se pueden esperar rentabilidades de dos cifras.
“Hablar de los techos o de los suelos de estos activos es como lanzar una moneda al aire. Si vendes más y ganas más, tu valoración bursátil sube. El mercado trabaja con expectativas, no con realidades. Si los inversores creen que va a ocurrir algo, quieren posicionarse antes”, explicó Pablo Gil, añadiendo que “a largo plazo, la probabilidad de que esta industria siga aumentando el peso en bolsa es una realidad”.