La industria de gestión de activos sigue el ritmo de la sociedad y, como ella, avanza cada vez más en la integración, también del colectivo LGTBIQ+ que hoy celebra su día internacional. Esta integración crea organizaciones con puntos de vista más ricos y complementarios y, según un informe de Credit Suisse, también con mejor desempeño.
Según el documento, titulado CS Gender 3000 (que demostró cómo la diversidad de género en cargos de alto nivel y juntas directivas coincide con un mejor desempeño bursátil), las compañías inclusivas LGBT han superado al índice MSCI ACWI por 378 puntos básicos por año desde 2010. A esta conclusión llega después de haber estudiado a 350 compañías inclusivas LGBT+ elegidas mediante fuentes externas de análisis sobre la aproximación de igualdad LGTBIQ+ en sus fuerzas de trabajo.
“La necesidad de las empresas de tener una posición proactiva hacia la diversidad es evidente, tanto por la habilidad de atraer y retener talento como por la relevancia económica de la comunidad LGTB+”, apunta el informe en sus conclusiones tras estimar que el gasto de consumo de la comunidad LGBT+ podría ser de cerca de 5,6 billones de dólares.
Según reconocen desde Credit Suisse, este análisis no pretende demostrar que el hecho de que una empresa se centre en la igualdad LGTB+ sea la razón de un posible rendimiento superior. “Simplemente, destacamos que estos dos factores coexisten para la media de las acciones del LGBT-350. Destacamos que 27 empresas de nuestro universo obtuvieron una puntuación superior a la media en calidad, las 29 obtienen una puntuación superior a la media en ESG y 22 obtienen también una puntuación superior a la media en impulso”, indica en sus conclusiones.
Otra tendencia dentro del sector es la creación de soluciones de inversión centradas en las oportunidades y tendencias en torno a este colectivo. Por ejemplo, M&G cuenta con el fondo M&G (Lux) Diversity and Inclusion Fund, una estrategia híbrida que incorpora enfoques de inversión sostenible y de impacto. “El fondo es una cartera concentrada de acciones globales, que invierte a largo plazo en empresas que tienen diversidad de género y/o étnica demostrable y lugares de trabajo inclusivos, o que proporcionan soluciones que potencian la igualdad social”, explica Thembeka Stemela, gestora del fondo.
En este sentido, la gestora selecciona las “empresas diversas” en función de sus credenciales ESG, su calidad financiera y su liderazgo, mientras que las «empresas de la inclusión» se seleccionan en función de la metodología de evaluación de impacto propia de M&G. “Aparte de las cifras de diversidad en los consejos de administración, la dirección y la plantilla, la parte de sostenibilidad del fondo también profundiza en las políticas, los procesos y las estrategias de diversidad en el lugar de trabajo de estas empresas para entender si la empresa ha proporcionado un lugar de trabajo inclusivo para todos los empleados. Además del género y la etnia, esto incluye a la comunidad LGTBIQ+ y a quienes se identifican como discapacitados o con necesidades especiales y a otros grupos infrarrepresentados”, matiza Stemela.
De esta forma, al menos el 15% del fondo se invierte en empresas que aportan soluciones a la desigualdad social. “Esta es la parte de impacto de la cartera. A través de sus productos y servicios, las acciones de la parte de inclusión de la cartera tratan de mejorar el alcance de las personas desatendidas o infrarrepresentadas”, añade.
No solo se trata de construir organizaciones más diversas e invertir en ellas, sino también tener en cuenta el valor que tiene este colectivo para el sector como potenciales inversores. Según la encuesta global de asesores financieros realizada por Natixis Investment Managers en 2022, el colectivo LGTBIQ+ es ya un importante cliente objetivo de inversión, hasta el punto de que el 12% de los asesores financieros a nivel mundial lo consideran como uno de los segmentos prioritarios a la hora de retener o captar nuevos clientes en los próximos 12 meses.
Este porcentaje cambia según la región en que nos encontremos. Por ejemplo, en España, la cifra se eleva al 16%; mientras que Singapur y Japón son los países donde más asesores financieros identifican al colectivo LGTB como una de sus principales prioridades de clientes, con un 29,3% y un 23,2% respectivamente.
Sin embargo, desde la gestora matizan que cuando se les pregunta si el colectivo LGTBIQ+ es su objetivo prioritario a la hora de captar o retener clientes, el porcentaje global baja al 2,1% en todo el mundo y cae al 4,7% en España. Japón es el único líder con un 11,3% de respuestas afirmativas, y en Singapur, el porcentaje baja al 6%. En este sentido, a nivel mundial, el segmento de la población que más interesa a los asesores financieros es el denominado «propietarios de negocios», con un 34%.