Desde el estallido de la crisis financiera, la búsqueda de rentas por parte de los inversores se ha intensificado y ha tirado a la baja de las rentabilidades en muchas clases de activos. En un entorno de reducción continua del endeudamiento, crecimiento bajo, tipos de interés en mínimos y envejecimiento de la población, la demanda de fuentes atractivas de rentas probablemente siga siendo fuerte durante los próximos años.
Fidelity WI ha preparado un documento en el que divide la inversión orientada a las rentas en tres grandes clases de activos (renta variable, renta fija y real estate), para después analizar el contexto de la inversión multi-activos.
Renta variable con reparto de dividendo
En la mayoría de clases de activos, las rentabilidades por rentas suelen ser un contribuidor más fiable a las rentabilidades totales que las rentabilidades por revalorización del capital.
A pesar de un periodo prolongado de excelente evolución, la renta variable sigue ofreciendo atractivas oportunidades de conseguir flujos de renta.
Mercados de renta fija
Ante la considerable compresión de los rendimientos y el arranque de la normalización de la política monetaria estadounidense, los mercados de renta fija requieren una cuidadosa gestión de los riesgos.
Sin embargo, los mercados de renta fija todavía ofrecen oportunidades atractivas de conseguir rentas aplicando un enfoque selectivo y generalmente con un menor riesgo que la renta variable.
A la vista de las expectativas generalizadas de subidas de tipos, lo lógico es reducir la exposición a duración, pero los inversores deben estar alerta ante los peligros de adentrarse demasiado por este camino. En concreto, Fidelity WI apunta que debe tenerse en cuenta que unos niveles moderados de duración protegen contra las caídas en el caso de acontecimientos macroeconómicos negativos, además de mantener las ventajas en forma de correlaciones bajas y diversificación de los bonos en el contexto de una cartera multiactivos
Real estate terciario
Determinados mercados de bienes raíces continúan ofreciendo buenas perspectivas en lo que se refiere a la estabilidad de las rentas.
Los inversores recurren a los inmuebles terciarios por varios motivos. Los bienes raíces suelen tener una baja correlación con otros activos y pueden ofrecer un importante potencial de revalorización del capital. Sin embargo, infinidad de datos procedentes de todo el mundo desarrollado indican que el motor principal de las rentabilidades inmobiliarias a largo plazo son, con diferencia, las rentas. Además, las rentabilidades por flujos de renta no sólo son un contribuidor esencial para el conjunto de las rentabilidades de los inmuebles terciarios: también suelen ser mucho menos volátiles que las rentabilidades sobre el capital.
Fidelity WI reseña que un enfoque multiactivos que invierta en una amplia gama de activos con correlaciones bajas podría ser una forma ideal de conseguir un flujo de rentas atractivo y estable.
Puede acceder al informe completo de Fidelity WI a través de este link.