Muchos comentaristas están hablando de un riesgo creciente de recesión. Nuestros propios modelos de recesión están de acuerdo y muestran una probabilidad superior al 50% de que suceda una recesión en los próximos dos años, tal y como se observar en el primer gráfico. Como las recesiones se asocian típicamente con rendimientos del mercado mucho peores, este riesgo creciente ha llevado a los inversores a buscar estrategias defensivas que enfaticen la gestión del riesgo en la caída. Creemos que incluso en los periodos de mayor riesgo de recesión, un posicionamiento defensivo tiene sentido para los inversores, especialmente para aquellos cuyo horizonte de inversión es limitado.
El mal comportamiento de los mercados a la baja
Creemos que la naturaleza de los mercados ha evolucionado desde la crisis financiera global. Nuestro análisis de los mercados desde 1987, año que el mercado sufrió la caída del Black Monday, muestra que antes de 2009, excluyendo los mercados a la baja que suelen estar asociados a las recesiones, cuando los mercados caen en un 20% o más desde sus últimos máximos, los inversores tienden a percibir las caídas del mercado como un “buen comportamiento”: una cartera equilibrada de bonos y acciones sufría una caída algo superior al 5% y nunca una caída superior al 10%. Por el contrario, en el ciclo actual del mercado, hemos visto seis episodios con una caída superior al 5% incluyendo una caída de más del 10% -una caída sin precedentes en frecuencia y magnitud para un mercado alcista en los últimos 30 años. Esto puede ser observado en el gráfico 2.
¿Se debe culpar a un cambio en la estructura del mercado?
Creemos que existen varios factores que han impulsado esta creciente fragilidad entre las clases de activos:
- La tasa de crecimiento de la economía ha sido más lenta durante este ciclo que en los anteriores, lo que significa que la economía global ha titubeado más cerca del precipicio de la recesión (y por lo tanto del riesgo de sufrir una caída severa) de lo que lo ha hecho con anterioridad.
- Para hacer frente a la situación, la intervención de los bancos centrales en los mercados se ha vuelto más significativa y creativa de lo que era anteriormente, lo que podría conducir a un entorno de “banquete o hambruna” en el terreno de la liquidez.
- La habilidad de los bancos del sector privado para absorber el riesgo se ha visto limitada por la regulación y las demandas de los accionistas para que sus modelos de negocios sean más confiables.
- Los índices pasivos que replican índices y los ETFs constituyen una mayor proporción en la base de inversores, lo que puede conducir a unas mayores posiciones de “rebaño” entrando y saliendo de sus posiciones, exacerbando los movimientos del mercado.
El impacto de estos cambios es evidente en el número de “flash crashes”- caídas repentinas del mercado en el que el valor de los activos ha cambiado significativamente durante un corto periodo de tiempo, como se ha visto durante este mercado alcista. Estas caídas repentinas del mercado no se han limitado a los mercados de renta variable y son probablemente una consecuencia de que la liquidez es más susceptible de agotarse de lo que lo era antes.
El impacto para los inversores
Este cambio en la estructura del mercado y el incremento de la frecuencia en las caídas del mercado resultante tiene un impacto significativo para los inversores. Este riesgo es particularmente relevante para aquellos inversores cuyos horizontes temporales no están alineados con las condiciones económicas actuales, sino más bien con sus propias necesidades específicas de rentabilidad, ya que sus activos pueden no recuperarse a tiempo de una caída para cumplir con sus obligaciones de pasivo. Una cohorte de inversores que se ha visto particularmente afectada son los jubilados, o aquellos que se aproximan a la edad de jubilación. Estos inversores no son capaces de confiar en los ingresos futuros para financiar las pérdidas de inversión, y por lo tanto, tienen que depender de los activos que ya han acumulado a lo largo de su vida laboral.
Con el envejecimiento de la población mundial, estos inversores están viviendo más años, por lo que también necesitan que su riqueza dure más tiempo. Para estos inversores, las reducciones pueden ser fatales para sus objetivos de inversión.
¿Por qué un posicionamiento defensivo tiene sentido?
La estrategia Global Multi-Asset Income se centra en los rendimientos defensivos, que definimos como una menor captura en mercados bajistas que durante los mercados alcistas. Creemos que este enfoque tiene sentido independientemente del contexto del mercado para las inversiones. El gráfico 4 muestra el desempeño desde el mínimo al máximo del fondo y sus competidores durante las caídas severas más recientes del mercado. La línea azul muestra las caídas menos dramáticas durante estos periodos desafiantes, lo que significa que nuestro enfoque de gestión sirvió de protección contra las pérdidas de capital en mayor medida que nuestros competidores. En ese momento, el uso de un enfoque en el riesgo de “no cobertura” cuando fue considerado apropiado, ayudó a recuperar las pérdidas más rápido y evito lo peor del impacto negativo.
Limitando la desventaja
Cuando el mercado de renta variable cayó, el fondo solo experimentó un 16% de estas pérdidas. Mientras que, si el mercado fue alcista, el fondo experimentó un 34,6% de las ganancias. Al concentrarse en minimizar la correlación a la baja (en contraste con muchos fondos que se enfocan en no producir ninguna correlación) la estrategia produjo el doble de la captura al alza que a la baja. Este es un atributo poderoso para capitalizar el rendimiento compuesto en un entorno que ofrece un bajo potencial para la apreciación de capital.
Conclusión
Para los inversores, el beneficio de invertir en un fondo defensivo durante un periodo de recesión debería estar claro, ya que el objetivo es reducir el impacto de las caídas en mercados significativamente bajistas para que sea más fácil recuperar el capital en el futuro.
Sin embargo, con los cambios en la estructura del mercado conduciendo hacia una mayor frecuencia y magnitud de las caídas en mercados alcistas, así como de las caídas repentinas del mercado, una estrategia defensiva tiene un rol importante para la cartera de un inversor a través del ciclo, particularmente para aquellos inversores que tienen obligaciones y necesidades en el corto plazo. Por eso creemos que una posición defensiva siempre tiene sentido.
Columna de John Stopford y Jason Borbora-Sheen, co-gestores de la estrategia Investec Global Multi-Asset Income de Investec Asset Management