Tras las subidas experimentadas por los mercados europeos de renta variable este año, comienzan a aparecer las primeras dudas que cuestionan el potencial de nuevas subidas a partir de ahora. Algunos incluso sugieren que la recuperación en Europa ha tocado techo, tras la débil temporada de resultados del primer trimestre, las revisiones a la baja de los beneficios empresariales, la menor fortaleza de los indicadores líderes y los datos del PIB hasta marzo. Todas estas preocupaciones han impulsado las cotizaciones de los sectores defensivos, como salud, utilities y alimentación, que se han comportado mejor que aquellos sectores considerados de más riesgo como financieras, medios de comunicación y tecnológicas.
Pero el equipo de Invesco de Renta Variable Pan Europea en Henley mantiene sus previsiones positivas para esta clase de activo, ya que estima que la recuperación europea está todavía en sus fases iniciales, por lo que mantiene un importante potencial a medio plazo.
Para el equipo, las valoraciones de las compañías europeas ajustadas al ciclo económico siguen presentando un descuento de un 20% de media, con algunos países como España, Italia y Francia presentando un descuento aun mayor, cercano al 30%. “Seguimos a favor de aquellos países y sectores más castigados durante la crisis, fundamentalmente los países periféricos y el sector financiero, ya que sus valoraciones siguen siendo muy atractivas, desde nuestro punto de vista”, explican.
Por sectores, los que presentan un mayor descuento respecto a sus medias históricas ajustadas son el financiero, aseguradoras y las compañías de petróleo y gas.
Buenas perspectivas económicas
A diferencia de otros análisis más pesimistas, en Invesco recuerdan que muchos de los problemas estructurales de Europa durante los últimos años han comenzado a disiparse. La demanda interna ha comenzado por fin su reactivación desde niveles muy deprimidos, por lo que tienen un largo camino que recorrer hasta los niveles anteriores a la crisis. “En nuestra opinión, existen varias razones por las que creemos que la demanda interna (excluyendo el gasto público), que supone casi tres cuartas partes del PIB europeo, seguirá recuperándose”, dicen en su último informe de Perspectivas de Mercado de Renta Variable Europea correspondiente a agosto. Así, teniendo en cuenta que la austeridad necesaria ya se ha llevado a cabo en gran medida y que hay una menor incertidumbre política, la confianza de los consumidores está rebotando significativamente desde sus niveles mínimos y las ventas minoristas y las de automóviles están comenzando a crecer de nuevo. Las inversiones de capital (capex) de las empresas se han estabilizado e incluso han empezado a dar señales de crecimiento, dice el estudio.
Además, la periferia ha dejado de ser un obstáculo para la actividad europea. Invesco destaca la recuperación en España, que ha crecido en el primer trimestre a su mayor ritmo en seis años, con indicaciones de que esta situación se puede mantener en el segundo trimestre. El desapalancamiento bancario, un obstáculo para los niveles de actividad en los últimos doce meses, debería suavizarse con la finalización del análisis exhaustivo del BCE a finales de este año. Además, la operación TLTRO aprobada recientemente debería aportar nuevos estímulos. La actividad económica fuera de Europa también se está fortaleciendo después de una débil primera mitad del año, lo que debería ayudar a las exportaciones europeas. Todos estos factores deberían apoyar una aceleración del crecimiento económico durante los próximos 18 meses, dando una mayor confianza de que una gradual mejora en Europa es el escenario más probable, explican.
En su opinión, cualquier mejora de la actividad económica debería suponer un impulso para las ventas de la mayoría de las empresas europeas. La fortaleza del euro respecto al dólar, uno de los problemas que han afectado a las ventas de las empresas, ha comenzado a remitir y debería tener un impacto menor según avance el año 2014. Las compañías europeas han gestionado muy bien sus costes durante la crisis, lo que las coloca en una buena situación para capitalizar cualquier crecimiento de los ingresos. “Seguimos confiando en que el crecimiento de los beneficios se mantenga, recuperándose de unos niveles muy deprimidos, abordando así uno de los problemas más importantes para el mercado de renta variable”.
En resumen, la gradual mejora de la actividad económica debería animar a los mercados a revaluar algunos de los sectores más penalizados durante la crisis, como por ejemplo bancos y aseguradoras. Además, algunos de los sectores más expuestos al ciclo económico también deberían beneficiarse de la mejora del entorno económico, como por ejemplo los medios de comunicación. “Encontramos que la relación beneficio/riesgo de estos sectores es mucho más atractiva que las de otras industrias que se han comportado mejor este año, como por ejemplo alimentación y utilities”.
El equipo de Renta Variable Pan Europea de Invesco en Henley está compuesto por 19 gestores que gestionan en la actualidad más de 50.000 millones de euros.