El incremento en la incertidumbre política no está teniendo mucho efecto en el sentimiento del mercado. ING IM apunta que aunque la demanda por los bonos gubernamentales ha aumentado, tanto la renta variable como los bonos high yield sigue su senda al alza.
Las elecciones italianas o el rescate de Chipre son ejemplos de eventos que podrían haber tenido una repercusión muy negativa en el mercado, que sin embargo ha ido acallándose a golpe de publicación de indicadores económicos que demuestran que la recuperación económica sigue en marcha. Esta recuperación es más patente en Estados Unidos, Alemania y Japón, mientras los mercados emergentes se están quedando notablemente retrasados.
En su último informe Marketscope, ING IM explica como la recuperación nipona, fundamentada en una política fiscal y monetaria expansiva, es una de las principales razones de la falta de popularidad de los mercados emergentes. «La fuerte deprecación del yen ahoga a otros exportadores asiáticos y además se traduce en que ahora, las restantes divisas asiáticas tienen una mayor probabilidad de depreciarse a su vez. Esta perspectiva acaba con una de las razones principales por las que los inversionistas globales asignan activos a la región y está resultando en flujos de salida tanto de los fondos de bonos como los de las acciones asiáticas», apunta el informe.
Japón es el mercado favorito de ING IM
Japón se ha alzado como mercado preferido de la gestora holandesa, ya que la fuerte depreciación del yen ha tenido un efecto muy positivo en los resultados empresariales. “Hemos elevado de nuevo nuestras previsiones de crecimiento de beneficios desde el +25% al +37% este año. Las valoraciones siguen siendo atractivas y creemos que el dinero seguirá fluyendo hacia este mercado. En conjunto, seguimos moderadamente sobreponderados en renta variable y bienes raíces, pero somos más selectivos por regiones y sectores”, concluye.