Muchos inversores han puesto el foco en la ESG a la hora de gestionar sus carteras. Marie-Pierre Peillon, directora de Análisis y Estrategia ESG de Groupama AM, y Stéphane Fraenkel, director asociado de Renta Variable y Convertibles de la firma, hablan sobre la importancia para las pequeñas y medianas compañías de trabajar en el análisis y promoción de su calidad ESG, ya que su calificación puede verse lastrada por no disponer de los recursos necesarios para recopilar y publicar esta información no financiera.
Los expertos aseguran que Groupama AM ha desarrollado una metodología de análisis única que le permite establecer su propio sistema de calificación para las empresas en las que invierte. Además, la firma desarrolla una intensa labor de asesoramiento en materia ESG en dichas compañías, con varias líneas de acción destinadas al progreso en este ámbito.
Además de los cargos que ostenta en la firma, Marie-Pierre Peillon es presidenta de la comisión de Finanzas Sostenibles («ISR») de la Asociación Francesa de Gestión de Activos («AFG») y miembro del grupo de trabajo del EFRAG para la normalización de datos no financieros. Asimismo, formará parte del comité de la etiqueta francesa de finanzas sostenibles («Label ISR»), cuya nueva gobernanza se ha anunciado recientemente. En esta entrevista, nos cuenta las claves de un análisis ESG para las pymes.
En lo relativo al análisis extrafinanciero, ¿cuáles son las características específicas del mercado de las pequeñas y medianas empresas?
Marie-Pierre Peillon: En general, hemos comprobado que la investigación ESG es más difícil de acceder en este segmento, especialmente en el caso de las pequeñas capitalizaciones. Esto puede explicarse por dos factores principales: en primer lugar, estas empresas no siempre disponen de los recursos (organizativos, humanos o simplemente el tiempo) para recopilar, formalizar y publicar su información no financiera; en segundo lugar, tienen menos obligaciones reglamentarias en este ámbito que las grandes empresas, aunque la propuesta de Directiva sobre la presentación de informes de sostenibilidad de las empresas (CSRD, por sus siglas en inglés) introducirá un ámbito de aplicación más amplio e inclusivo, que abarcará a casi 49.000 empresas europeas, frente a las 12.000 de la actual Directiva sobre la presentación de informes no financieros (NFRD, por sus siglas en inglés). Así, en la actualidad, con relativamente pocos datos disponibles, las agencias de calificación no financiera tienden a rebajar las calificaciones de las empresas más pequeñas. Esta «ineficacia» puede conducir a una forma de «sesgo de calificación», en la que la evaluación no siempre refleja la realidad de la empresa, con el resultado de que los fondos de inversión se desvían de las pequeñas y medianas empresas.
Así pues, la «escasez» de datos perjudica el análisis….
MP: Actúa como un freno. En consecuencia, el reto para los gestores de activos y los inversores es compensar esta relativa escasez de información, y el sesgo de calificación asociado, mediante herramientas propias de investigación y análisis. El desarrollo de una metodología de análisis «de la casa» nos permite establecer nuestro propio sistema de calificación, para complementar la investigación proporcionada por las agencias no financieras. Este enfoque ha demostrado ser indispensable a la hora de invertir en empresas de pequeña y mediana capitalización.
¿Cuáles son las principales áreas en las que las pequeñas y medianas empresas pueden progresar?
MP: Asistimos a una creciente toma de conciencia de la importancia de los factores no financieros por parte de los directivos de las empresas. Sin embargo, el ámbito en el que más se puede avanzar es el de la gobernanza. Se trata de empresas bien gestionadas pero en las que el equilibrio de poder en los órganos de decisión no siempre es suficientemente explícito. La formalización de las garantías ofrecidas a los accionistas minoritarios también es insuficiente.
¿Qué papel puede desempeñar la industria financiera con respecto a estas empresas?
MP: En primer lugar, los inversores y los gestores de activos deben ayudar a las empresas a definir y formalizar sus riesgos y oportunidades en materia de ESG. Esto debería sentar las bases de un enfoque basado en la colaboración y el diálogo para apoyar el progreso de las empresas. Por ejemplo, creemos mucho en las virtudes del compromiso de los accionistas por parte de los inversores. Nuestro papel es hacer que los Consejos de Administración de las empresas en las que invertimos conozcan nuestras expectativas, y este enfoque implicará forzosamente tanto el diálogo como la política de voto de los accionistas. Sin embargo, debemos dejar claro que, para Groupama, «compromiso» no significa «activismo». Siempre damos prioridad al diálogo y no a las sanciones para alertar a los directivos sobre las mejores prácticas.
Stéphane Fraenkel: Este diálogo con los accionistas es la clave para nosotros, dado que somos inversores de convicción a largo plazo. Nos comprometemos con las empresas durante períodos de 3, 5 o 10 años, siguiendo una filosofía de asociación y compromiso constructivo. Los criterios no financieros solo pueden apreciarse a largo plazo.
¿Qué forma adopta este compromiso en la práctica?
SF: Desplegamos varias formas de acción. Por ejemplo, animamos a determinadas empresas a publicar un informe de sostenibilidad o indicadores no financieros que consideramos esenciales. Desde el punto de vista práctico, estos indicadores pueden referirse a datos de consumo energético por unidad de producción o a indicadores de formación del personal. También podemos ser muy activos en cuanto a la política de voto en las Juntas Generales. Este es el caso cuando identificamos problemas de equilibrio de poder en el gobierno corporativo, que suele ser un tema más sensible en las pequeñas y medianas empresas con capital familiar.
MP: Para ilustrar nuestro enfoque, está el caso de una empresa con la que iniciamos un diálogo sostenido con los accionistas allá por 2014, y que ahora se ha transformado en un compromiso a largo plazo. Groupama AM expresó repetidamente su desacuerdo con la política salarial de la empresa, la estructura del consejo de administración, el equilibrio de poder y, finalmente, la política de RSC. Esto dio lugar a votos en contra de las resoluciones relativas a estas cuestiones.
Como la empresa se mostró abierta al diálogo, pudo escuchar nuestras recomendaciones y luego tomar medidas correctoras. Observamos un reequilibrio entre la retribución fija y la variable, la introducción de un mecanismo de «clawback», la limitación de las ‘prejubilaciones doradas’ y las indemnizaciones por no competencia, así como la reducción del número de acciones de rendimiento. La gobernanza se hizo más transparente hacia el exterior, con un Consejo más racionalizado. Por último, se ha creado recientemente un comité de RSC (Responsabilidad Social Corporativa), compuesto por cuatro miembros independientes dentro del consejo, dos años después del nombramiento de un responsable de la política de RSC. Hoy en día, esta empresa solicita regularmente nuestro asesoramiento antes y después de las Juntas Generales.
¿Qué valor aporta el análisis no financiero al gestor de la cartera?
SF: Lejos de ser una preocupación que sólo concierne a las grandes capitalizaciones, la incorporación de criterios ASG contribuye a garantizar que las empresas estén en la buena senda del crecimiento sostenible. El ámbito no financiero es parte integrante de la actividad económica cotidiana de estas empresas.
Gracias a nuestro enfoque transversal y a nuestros experimentados equipos de analistas -con la particularidad de que cada analista estudia tanto el dominio financiero como el no financiero-, ESG proporciona una metodología de análisis única y específica para Groupama AM: utilizamos ESG como filtro para aprehender las tres principales transformaciones que aportan cambios profundos a los modelos de negocio de las empresas, a saber, la transición medioambiental y energética, la transición digital y, por último, la transición demográfica. Invertimos en el futuro. Para los inversores a largo plazo como Groupama AM, la alineación de los intereses no financieros y financieros ya no es una simple opción.
Este documento tiene un carácter meramente informativo. Groupama Asset Management y sus filiales no se hacen responsables de cualquier modificación, distorsión o falsificación de este documento. La información contenida en este documento es confidencial y está reservada al uso exclusivo de sus destinatarios. Se prohíbe cualquier modificación, uso o distribución no autorizada de todo o parte de este documento, por cualquier medio. La información contenida en esta publicación se basa en fuentes que consideramos fiables, pero no garantizamos su exactitud, integridad, validez o relevancia.
Este documento se ha elaborado sobre la base de informaciones, proyecciones, estimaciones, previsiones e hipótesis que implican un grado de juicio subjetivo. Los análisis y las conclusiones expresan una opinión independiente formada a partir de la información disponible públicamente en una fecha determinada y aplicando una metodología propia de Groupama AM. Dado el carácter subjetivo e indicativo de estos análisis, no pueden interpretarse como un compromiso o garantía jurídicamente vinculante por parte de Groupama AM ni como un asesoramiento financiero personal.