Los profesionales financieros esperan que las rentabilidades bursátiles dejen atrás las fuertes pérdidas para cerrar el año con un descenso de tan solo el 3,6%, según la última encuesta de Natixis Investment Managers. Además, pese a registrarse pérdidas de hasta el 34% en las primeras semanas de la crisis, lo expertos subrayan que se fueron moderando moderaron hasta menos del 10% de abril.
Del mismo modo, la encuesta refleja que el 51% de los profesionales financieros de todo el mundo considera que la volatilidad inicial provocada por la crisis del coronavirus obedeció más al sentimiento que a los fundamentales. “Convencidos de que el mercado seguirá entonándose en el segundo semestre del año, la principal preocupación de los profesionales financieros es la incertidumbre sobre lo que ocurrirá ahora, incluida la reacción de los inversores”, apuntan desde Natixis IM.
Según la encuesta, los participantes pronostican unas pérdidas globales del 7% en el S&P 500 y del 7,3% en el índice MSCI World a finales de año. Las expectativas de rentabilidad para 2020 se asemejan más a los leves descensos observados en 2018 que a lo sucedido en 2008, cuando el S&P y el MSCI se hundieron un 38,5% y un 42,1%, respectivamente. Según la encuesta, las perspectivas son más optimistas en el mercado estadounidense, pero en el resto de regiones los profesionales financieros se muestran notablemente más pesimistas respecto a la evolución de las acciones en sus propios mercados. Los situados en Hong Kong, Australia, Italia y Alemania esperan pérdidas de dos dígitos en el conjunto del año.
El principal riesgo para la evolución de las carteras sigue siendo la volatilidad. Dos tercios (69%) de los encuestados apuntan a esta como su principal preocupación, seguida de cerca por el miedo a la recesión (67%). Casi la mitad (47%) afirmó que la incertidumbre geopolítica plantea un riesgo para sus carteras. En lo que supone una clara diferencia en materia de riesgos percibidos con respecto a las anteriores ediciones de la encuesta, una quinta parte (19 %) de los encuestados mostró preocupación por los bajos rendimientos de la renta fija, mientras que los problemas de liquidez aparecieron en las respuestas del 17% de los encuestados.
“La volatilidad ha alcanzado cotas no vistas en años, por lo que seguimos prestando apoyo a los profesionales financieros mientras ayudan a sus clientes a afrontar la incertidumbre en un mercado marcado por el sentimiento de los inversores en un contexto propicio para las decisiones de inversión emocionales”, apunta Sophie del Campo, directora general de Natixis IM para Iberia, América Latina y US Offshore.
Tras una racha de 12 años en la que el S&P 500 registró unas rentabilidades anuales de casi el 13% y los máximos de enero y febrero, las pérdidas provocadas por la pandemia de coronavirus fueron rápidas y sorprendentes en su magnitud. “Poco importa que casi la mitad de los profesionales financieros (47 %) esté de acuerdo en que los mercados estaban sobrevalorados en esos momentos; ocho de cada diez (81 %) creen que el prolongado mercado alcista hizo que, en general, los inversores fueran complacientes con el riesgo”, destacan desde Natixis IM. El 49% de los encuestados afirma que sus clientes se resisten a ajustar las carteras mientras los mercados suban.
“La caída de los mercados, y la recuperación prevista, sirve como lección de psicología económica, aunque se haya aprendido por las malas en forma de pérdidas reales y objetivos incumplidos”, asegura Dave Goodsell, director ejecutivo de Natixis Center for Investor Insight. Goodsell subraya, además, que los inversores tuvieron la ocasión de ver de nuevo cómo es el riesgo, y por ello, se trata de un momento educativo: “Los profesionales financieros pueden demostrar su valía hablando con los clientes en términos reales sobre el riesgo y las expectativas de rentabilidad, ayudándoles a diseñar carteras resistentes y cómo mantener la raya las emociones durante las oscilaciones de los mercados”. No obstante, el 67 % de los profesionales financieros encuestados piensa que los inversores particulares no estaban preparados para una caída de los mercados.
Gestión activa
Por otro lado, ocho de cada diez encuestados (79%) creen que el entorno actual es propicio para la gestión activa. “Para los que afrontan la volatilidad como una oportunidad de compra y ajuste, se trata de otro momento educativo para el posicionamiento de las carteras y la gestión activa”, aseguran desde Natixis IM. Casi siete de cada diez asesores están de acuerdo en que los inversores tienen una falsa sensación de seguridad en las inversiones pasivas (68% a nivel global; en el caso de España la cifra se eleva al 80%) y no entienden los riesgos que conllevan (72% globalmente, un porcentaje que es del 76% en el caso español).
“Los profesionales financieros están respondiendo ante los nuevos retos a la hora de gestionar las inversiones, las expectativas y los comportamientos de los clientes. Sometidos a presiones de los reguladores, del sector y de los mercados, su enfoque está cambiando en todos los frentes: estrategia de inversión, atención al cliente, gestión administrativa y formación”, afirma la gestora.
La encuesta recoge las opiniones de 2.700 profesionales financieros, entre asesores de sociedades de valores y bolsa, asesores de inversiones registrados e intermediarios y agentes independientes, que suman un volumen total de activos de clientes de 134.600 millones de dólares en 16 países y territorios de Asia, Europa continental, el Reino Unido, Norteamérica y Latinoamérica. En EE. UU., CoreData encuestó a 300 profesionales financieros con una media de 20 años de experiencia en el sector.