Es un buen momento para invertir en renta variable europea, según defendieron Javier Galán y David Cabeza, gestor y analista respectivamente de renta variable en la gestora de Renta 4, en un encuentro con periodistas esta mañana en Madrid. ¿Las razones? Los vientos de frente de los últimos años –como la caída en las materias primas o el parón de los emergentes- son susceptibles de convertirse en vientos de cola durante 2017. Además, los expertos creen que nos encontramos en un momento de valoraciones razonables y en el que los beneficios están por debajo de su potencial en Europa.
Según Cabeza, los riesgos existentes se traducirán en volatilidad pero ésta es lo mejor que les podía pasar a los inversores. “Tenemos nuestra lista de la compra de compañías que nos gustan y cuando lleguen las rebajas, compraremos”, asegura. Del entorno macroeconómico sólo les preocupa la posibilidad de una recesión que en principio descartan (en Europa lo ven lejano, pero sobre todo más lejos en EE.UU., que se beneficiará de estímulos fiscales).
Bolsa española
Y en este contexto, también será una buena idea invertir en España, según explica Galán, que presume de buenos resultados en sus dos fondos de renta variable española y europea, Renta 4 Bolsa FI y Renta 4 Valor Europa FI.
En 2016 Renta 4 Bolsa FI alcanzó una rentabilidad del 7,3% frente a una caída del Ibex 35 del 2%, un ejemplo de la importancia de la gestión activa y de alejarse de los índices para poder generar alfa. “El sector bancario pesa mucho en el Ibex 35 y sólo un 5% en la economía real. No nos queda otra que diferenciarnos de los índices”, explica. Pero la clave, a su juicio, está en los beneficios empresariales que actualmente se sitúan un 50% de su potencial, cuyo máximo se registró en el año 2007. “En 2016 los beneficios han tocado suelo, así que a partir de ahora sólo cabe mejorar”, dice.
De hecho, cree que Ibex 35 que se moverá en una franja entre los 8.000 y los 11.000 puntos. “Por debajo sería una oportunidad de entrada clara y por encima hablaríamos de valoraciones muy exigentes sólo justificables por un aumento de los beneficios mayor de lo esperado”, comenta el gestor.
Calidad y valor
En el proceso de construcción de la cartera de ambos fondos, Renta 4 opta, por un lado, por compañías de alta calidad y defensivas que estén claramente alineadas en tendencias estructurales de futuro, tales como el sector de la salud. Estos “Quality Compounders” conforman entre el 50% y el 60% de la cartera. El otro 40%-50% se rige por un estilo de inversión value que identifica títulos infravalorados y que aportan mayor volatilidad. Galán identifica en el mercado español a compañías como Inditex, Grifols, Viscofán y Ferrovial dentro de los “Quality Compounders” mientras que la inversión en valor apostaría por CAF, Indra, Repsol o Técnicas Reunidas.
La gestora mantiene pocas posiciones en el sector financiero y sólo tiene en cartera Santander y BBVA “por su exposición geográfica a zonas donde los tipos interés están por encima del 0%”. En este sentido, Galán señala que “los bancos necesitan tipos de interés sustancialmente más altos para alcanzar ROES del 10%, que es el objetivo de cualquier entidad financiera”. Aun así, reconocen que el financiero, junto al sector de materias primas y petróleo, serán los que tendrán mayor crecimiento de beneficios en 2017, “aunque quizá no se refleje en precio porque ese recorrido ya se ha realizado en parte”.
Corrección brusca, oportunidad de compra
De cara a los eventos políticos posibles de este ejercicio, elecciones en Francia o ruptura del euro, los expertos de Renta 4 creen que, tal y como sucedió tras el referéndum sobre el Brexit, las caídas bruscas de los mercados constituyen una oportunidad de compra mientras no se anticipe un escenario de recesión. “Si no hay recesión a la vista, cualquier corrección hay que aprovecharla para tomar posiciones”. En ese caso, tienen claro que prefieren aumentar posiciones en la parte de compañías de calidad y defensivas más que por la parte de value investing.