La crisis griega ha dominado los flujos de información en las últimas semanas, culminando con un principio de acuerdo sobre un tercer rescate cuyos términos aún no se conocen. La situación sigue fluyendo y mantiene un alto grado de incertidumbre, pero, aparte de algo de volatilidad en el corto plazo, el equipo de Investec AM cree que el impacto de lo que ocurra en los mercados globales será insignificante de cara a las decisions que puedan tomar los inversores en los mercados emergentes.
A su parecer, se han registrado acontecimientos más relevantes para esta clase de activos en los últimos tiempos. En primer lugar, la actividad económica norteamericana ha experimentado una mejora palpable, que tiene implicaciones sobre los tipos de interés estadounidenses; y, en segundo término, la política fiscal y monetaria china parece estar volviéndose más estimulante, en un intento de reducir los riesgos asociados a una ralentización económica más severa, dice el equipo en su Emerging Market Debt Outlook.
“Nuestro punto de partida sigue siendo que la Fed inicie un ciclo alcista en septiembre”, dice el informe. Sin embargo, la firma mantiene la opinión de que veremos un ciclo de ajuste por parte de la Fed muy gradual a partir de ahí e incluso que la primera subida vendrá acompañada de buenas palabras. La volatilidad del mercado en junio vio un debilitamiento en el flujo de inversores hacia los mercados emergentes hasta convertirse en el ritmo más lento del año, a pesar de que los flujos hacia la deuda emergente se mantienen positivos (fuente IIF). Según la opinión de la gestora, la volatilidad puede persistir hasta que veamos más claridad sobre qué camino tomará la Fed en su escalada, pero continúan creyendo que no veremos flujos de salida drásticos de esta clase de activo.
Eso sí, Investec AM se mantiene cauto en cuanto a las perspectivas de crecimiento. Los expertos reconocen que están animados por la mejoría de los datos de los mercados desarrollados, pero la información que llega de los emergentes, a su forma de ver, continúa siendo decepcionante. La gestora espera que el crecimiento chino se modere aún más: mientras que ciertas medidas facilitadoras deberían prevenir un deterioro más profundo, la firma ve muy poca demanda subyacente como para generar crecimiento a corto plazo.
“Creemos que la inflación continúa contenida en la mayoría de los mercados emergentes y la perspectiva de un crecimiento moderado en China implica que no preveamos sorpresas para los precios de las commodities, a la vez que cualquier preocupación por los riesgos climáticos relacionados con El Niño se están apagando”, dice el informe. “Creemos que esta clase de activo, a pesar de los vientos en contra a corto plazo, debería comportarse mejor en los próximos años”, concluye.