La economía mundial se ecuentra en una fase de recuperación, y así lo refleja el reloj de la inversión de Fidelity Worldwide Investments, que abarca cuatro fases: estagflación, reflación, recuperación y sobrecalentamiento. La actual, la de recuperación, es favorable para la renta variable, lo que explica la asignación de activos de la gestora.
Actualmente, y desde hace más de un año, mantiene “una considerable sobreponderación en acciones”, según explica Trevor Greetham, su director de asignación de activos. “A la vista de que la política monetaria sigue siendo expansiva y que las presiones inflacionistas son mínimas, esperamos que el entorno favorable continúe y que el crecimiento se acelere conforme se vayan difuminando los efectos negativos relacionados con la política presupuestaria en EE.UU.”, explica.
De hecho, ahora que considera que China interpreta el papel desinflacionista de Japón en la década de 1990, cree que el entorno positivo para las bolsas desarrolladas podría durar años. De ahí la sobreponderación en acciones estadounidenses y japonesas, unos mercados que suelen salir beneficiados de la fortaleza del dólar.
Por el contrario, la gestora está infraponderada en los mercados emergentes, los bonos y los sectores bursátiles sensibles a los tipos de interés. En su opinión, los inmuebles físicos deberían seguir ofreciendo sólidas rentabilidades.
También infrapondera las materias primas, de forma más acentuada que en el pasado. “El exceso de capacidad, la fortaleza del dólar y el crecimiento inferior a la tendencia a largo plazo en China son lastres estructurales. Desde febrero de 2013, nuestra mayor infraponderación ha sido el oro”, explica el experto.
Un entorno de recuperación
Según su análisis, el entorno de recuperación viene marcado por varios indicadores. En primer lugar el crecimiento, pues los indicadores adelantados del crecimiento mundial siguen dando muestras de fortaleza y sugieren que el entorno favorable perdurará, según Fidelity. En segundo lugar, las presiones inflacionistas siguen siendo bajas y su hoja de ruta de la inflación ha apuntado a la baja en 22 de los últimos 24 meses.
Por último, la Reserva Federal estadounidense ha comenzado a reducir su programa de relajación cuantitativa, pero recuerda que el presidente Bernanke ha recalcado que esta reducción no tiene como finalidad endurecer las condiciones monetarias y que los tipos de interés seguirán en niveles bajos durante mucho tiempo si la inflación se mantiene por debajo del objetivo del 2%.