El New Capital Strategic Portfolio es un fondo mixto de New Capital by EFG Asset Management que desde la gestora recomiendan como aproximación para los inversores que desean empezar a invertir en renta variable, ya que es una estrategia global multiactivos gestionada con mucha flexibilidad y que ha sido calificada con cinco estrellas Morningstar gracias a su gran consistencia en el largo plazo. De hecho, ha estado en el primer cuartil por rentabilidad de su grupo de comparables a lo largo de los últimos seis años.
El punto de partida de este fondo es una cartera muy equilibrada, con asignaciones del 40% a bonos, 45% a acciones y el 15% restante repartido entre real estate, commodites, hedge funds y cash. El Comité de Global Asset Allocation determina la visión macro de la casa, que es utilizada por el equipo gestor – liderado por Moz Afzal (en la imagen), Sailesh Bundia y Jack Peters– para determinar la selección por clases de activo y regiones. Después, esta visión se confronta con una serie de parámetros de inversión y se aplican sesgos tácticos de acuerdo con esa estrategia de inversión. El equipo de análisis realiza un filtrado bottom-up que da como resultado un universo de activos en línea con la asignación de activos táctica del fondo, y a partir de este universo y de los parámetros de inversión se construye la cartera de este producto. El posicionamiento actual del fondo, aprovechando que el equipo gestor dispone de flexibilidad para gestionar su mandato, revela una sobreponderación en renta variable, que suponen un 58,58% de la cartera, mientras que el gestor está prácticamente neutral en real estate e infrapondera hedge funds, materias primas y bonos especialmente, que ahora suponen un 23.86% de la cartera.
En renta variable, el fondo sobrepondera actualmente EE.U. y China, mientras que infrapondera Europa y Reino Unido. La cartera presenta un sesgo hacia nombres con componentes growth y quality como los tecnológicos (Amazon, Apple, NVIDIA, Netflix) o de consumo discrecional (Canada Goose), que el gestor pudo comprar a precios razonables durante la corrección del primer trimestre y ahora mantiene en cartera.
En la parte de renta fija, la cartera ofrece exposición a emisores soberanos de muy alta calidad (con grado de inversión), aunque el gestor ha podido empezar a añadir recientemente algunos nombres con rating BBB y también procedentes del espectro high yield con un enfoque oportunista, para aprovechar las oportunidades generadas por la volatilidad de los mercados en los últimos meses. De esta manera, la asignación a renta fija de la cartera del New Capital Strategic Portfolio presenta un rating medio BBB+ con una duración media de cuatro años.
Un mercado que castiga selectivamente
“En 2020, los gestores que hayan realizado un análisis correcto y comprado en el momento justo están obteniendo unos rendimientos muy buenos”, explica Moz Afzal, CIO y gestor del fondo. Afzal ofreció en una videoconferencia mantenida con clientes latinoamericanos de la firma una actualización de la visión multiactivos de la estrategia. La clave una vez más consiste en poder evaluar correctamente cuáles son las expectativas del mercado y confrontarlas con la situación macro, las proyecciones de beneficios y las valoraciones de los distintos activos en los que puede invertir el fondo.
El comportamiento de los mercados ha estado definitivamente marcado por el fuerte mercado bajista visto en marzo, cuando la pandemia adquirió escala mundial. Afzal explica que el año comenzó con la mayor parte de valoraciones en territorio fair value, con excepciones como EE.UU., que considera que ya estaba caro. Como las ventas de marzo fueron indiscriminadas, producidas por el pánico de los inversores, el resultado fue que todos los activos se quedaron baratos, volviendo a animar eventualmente el apetito por el riesgo y renovando las compras de los inversores. ¿En qué punto estamos hoy? “No hemos vuelto a la situación en la que estaban los mercados en enero en general, pero la clave es que sí hay sectores que se han revalorizado tanto que ahora están caros, incluso en términos históricos, como el de la tecnología, y también en términos relativos, como consumo discrecional y salud”, explica el gestor.
Para Azfal, en los próximos trimestres será muy importante saber evaluar correctamente los precios a los que están cotizando las acciones en relación con las previsiones de beneficios de las compañías. Para el caso concreto del S&P 500, el gestor indica que el cuarto trimestre de 2020 cerrará con pérdidas generalizadas, pero que previsiblemente se inicie una recuperación de los beneficios de las compañías estadounidenses en 2021. Sin embargo, “las cotizaciones ya han reflejado esta recuperación y ahora todo parece caro, por lo que se vuelve fundamental comprender hacia dónde se están dirigiendo los flujos de dinero”, afirma el experto. Éste pone el caso de las empresas tecnológicas: las proyecciones de las casas de análisis apuntan a un crecimiento del EPS del 5,6%, que podría incrementarse al 23% en 2021.
Como consecuencia, el P/E de estas compañías se ha disparado, pero en opinión del experto no puede tomarse este dato como único indicador de valoración “porque son compañías muy resilientes”, especialmente si compara con lo que está pasando en otros sectores: “Los mercados están poniendo en precio que el real estate no se va a recuperar hasta 2022 o 2023, y no esperan que la energía se recupere de las pérdidas vistas este año hasta 2023 por lo menos”, señala Azfal.
El experto concluye su análisis con un aviso para navegantes: “El mercado está siendo muy exigente: está penalizando a aquellos sectores en los que no cree que vaya a haber recuperación a un año vista y premiando por adelantado a los que cree que se recuperarán el año que viene. Pensamos que seguirá comportándose así durante algunos meses”.