En términos de inversión, denominar a un activo como un «perro» en Occidente, generalmente significa que se está hablando de una mala inversión. Pero las cosas son un poco diferentes en China. De hecho, todavía es popular nombrar a los perros como Wàng Cái, que significa ‘riqueza próspera’ y proviene de como está representado en chino el sonido de los ladrillos: wàng wàng.
De acuerdo con Greg Kuhnert, Wilfred Wee y Michael Power de Investec, esto podría ser profético para los activos chinos en el próximo año, aunque como siempre, están conscientes de que los riesgos permanecen.
En su opinión, hay cinco temas que los inversionistas pueden esperar:
Creciente liderazgo chino en el medioambiente
En la astrología china, a cada año también se le asigna uno de los cinco elementos chinos: madera, fuego, tierra, metal y agua. El año del perro se combina con el elemento Tierra. La tierra equilibra el yin y yang, y su energía se está estabilizando y conservando por lo que se podría ver un progreso acelerado en los problemas del medio ambiente en China.
China ya es el líder mundial en la fabricación de paneles solares y capacidad instalada de la energía eólica. Cuatro de las ocho principales empresas de fabricación de baterías del mundo son Chinas. «Pensamos en la energía renovable como la cuarta revolución industrial. Además, el índice de calidad del aire en Beijing, que estacionalmente aumenta en los meses de invierno, se ha mantenido muy contenido este invierno», mencionan los directivos.
La emergencia de China como una superpotencia tecnológica
Cada año chino también está asociado con el yin o el yang. «Este año del perro es yang, que significa positivo y activo. En ninguna parte esto se refleja más que en el surgimiento de China como una superpotencia tecnológica» añade el equipo. El comercio electrónico en China es aproximadamente el doble que el de los EE.UU., mientras que los pagos móviles en China son 11 veces mayores que en los Estados Unidos. Un gran beneficiario de este cambio ha sido la industria de venture capital de China, que ha crecido desde 12.000 millones de dólares en 2011-13 a 77.000 millones en 2014-16.
La liberalización de los mercados de capital en China
«El aspecto ‘yang’ del próximo año también hace referencia al lado «soleado» de la dualidad yin / yang, y ciertamente esperamos que brille más luz solar en los rincones previamente cerrados de los mercados de activos chinos», mencionan añadiendo que a medida que el mercado de acciones nacionales de China se abra más a los inversionistas institucionales extranjeros y el MSCI eleve su factor de inclusión para el mercado de acciones A, los extranjeros se convertirán en un participante más grande en el mercado de acciones A. Como resultado, esperarían que aumenten las correlaciones con otros mercados de acciones globales. «Sin embargo, creemos que esto llevará mucho tiempo y, por lo tanto, los inversores que accedan a la oportunidad anticipadamente disfrutarán de estas menores correlaciones». Mientras tanto en los mercados de deuda chinos, con el tercer mayor emisor de bonos del gobierno en el mundo, la propiedad extranjera se encuentra por debajo del 3%.
El crecimiento del renminbi como moneda de reserva
El perro es considerado un socio trabajador y confiable. La moneda china está empezando a reflejar estos atributos a medida que su importancia crece en el escenario internacional. «Aunque no vemos a China desplazando al billete verde como moneda de reserva mundial en el corto plazo, el efecto de incrementos en las tenencias de reservas podría continuar impulsando el valor de la moneda, con efectos de arrastre para otras áreas de la economía».
Una ralentización en el crecimiento de la deuda
«Un rasgo clave de la personalidad del perro en la astrología china es que a pesar de cómo actúan, están preocupados y ansiosos por dentro, como sabe cualquier persona que haya tenido un perro…
El año del perro tampoco está exento de ansiedad en la forma de la montaña de la deuda china. Pero al igual que el perro zodiacal leal y trabajador, la situación de la deuda de China no se detendrá» señalan lo sexpertos de Investec.
Los mercados de activos tienen un precio de tres variables: el ‘absoluto’, el ‘cambio’ y la ‘tasa de cambio’.
En cuanto a los niveles de deuda de China, los dos primeros son claramente negativos para las valoraciones de los activos chinos. El nivel de deuda (el ‘absoluto’) en China es absolutamente alto y continúa creciendo (el ‘cambio’).
Sin embargo, la tasa de aumento (es decir, la «tasa de cambio») se está ralentizando claramente, explican. «En otras palabras, ‘la tasa de cambio’ ahora se está volviendo positiva. Este es un desencadenante importante para que el mercado se vuelva menos temeroso para la economía de China, lo que potencialmente proporcionará apoyo para la valoración de activos. En el año del perro, los inversores deberían estar buscando signos de que este ritmo de crecimiento siga disminuyendo», concluyen.