Se cierra un año intenso, de noticias inesperadas y sobresaltos en las bolsas, pero ahora hay que mirar al futuro y no perder de vista algunos temas que podrían ser clave en las inversiones de 2016. Estos son para los expertos de Investec los cinco temas a los que habrá que estar extremadamente atento el próximo año:
Necesidad de un portfolio resistente
Más que nunca, los inversores se enfrentan a un mundo que parece lleno de potenciales peligros. En consecuencia, exigen cada vez más portfolios robustos que puedan tener mejores resultados que el mercado en entornos difíciles y que sean resistentes frente a acontecimientos imprevistos. La elección de los activos que forman parte de la cartera tiene que equilibrar las ventajas y desventajas entre el potencial retorno y la exposición al riesgo, y garantizar un nivel de diversificación fuerte y adecuadamente adaptable a un escenario impredecible. Una consideración importante es la durabilidad de la generación de flujo de efectivo de las compañías. También es clave evitar el riesgo de que se produzcan cambios disruptivos. Los portfolios también tienen que limitar la exposición a las partes menos líquidas del mercado y contar con estrategias para hacer frente a episodios de tensión en los mercados.
Divergencia en las políticas monetarias
Tras haber registrado un proceso de recuperación económica, Estados Unidos ha elevado los tipos de interés. Sin embargo, Europa sigue estando al menos tres años por detrás de esta etapa, que solamente ha empezado a atisbarse en la deuda del sector privado. Asia, y China en particular, están muy lejos de esta etapa y su relación deuda-PIB sigue siendo alta, lo que sugiere que en los próximos años aún veremos una política monetaria laxa. Creemos que las divergencias entre las políticas monetarias subrayan la necesidad de gestionar de forma dinámica la exposición a divisas para manejar la volatilidad y capturar las oportunidades cuando se presenten.
Hay que ser selectivos en los mercados emergentes
El universo de activos de los mercados emergentes es tan diverso que ofrece una amplia gama de oportunidades de inversión. Si bien hay algunos factores homogéneos, es probable que persistan el próximo año la diferencias que ahora mismo caraterizan estos mercados. Esto conllevará algunas dificultades, pero también algunas oportunidades mejores que las que hemos visto recientemente. Somos positivos en las economías que tienen exposición a los mercados desarrollados, como México a EE.UU. o Hungría a Europa. Ambos países se benefician de la recuperación de sus vecinos tanto en su crecimiento como en su actividad.
Buscar oportunidades bottom-up
Creemos que el ambiente de inversión de 2016 proporcionará un contexto más favorable para la selección de valores verdaderamente activa, con un sesgo bottom-up en comparación a los últimos años. La vuelta de oportunidades específicas en el stock-picking, la caída de las correlaciones y la subida gradual de tipos de la Fed va contribuir a esto. Creemos que la adopción de un enfoque bottom-up (no sólo para la inversión en renta variable) es vital para contrarrestar a corto plazo el ruido macroeconómica que puede nublar el juicio de los inversores.
Factores de gobierno corporativo
El próximo año los factores de responsabilidad social corporativa pasarán a estar en el centro del escenario para muchos inversores y pasarán a ser vistos como un motor clave en la creación de valor a largo plazo. Japón es un ejemplo de países que están implantando programas de reformas de gobierno corporativo que envían señales alentadoras a los accionistas. Corea del Sur es otra.
En el otro lado tenemos el escándalo en Volkswagen, que puso de relieve el mal gobierno corporativo en términos de su estructura de votación y, lo que es más importante, la composición su Junta Directiva. Por su parte, la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU celebrada hace poco en París (COP 21) ha reiterado que las cuestiones medioambientales preocupan cada vez más. La idea de que la sostenibilidad debe ser un pilar de la inversión no es nuevo.