El sector tecnológico ha sido uno de los grandes beneficiarios del contexto de escaso crecimiento de los últimos años. Los valores tecnológicos orientados al crecimiento cotizan con una prima respecto del PER estimado del mercado. No obstante, ante el contexto de crecimiento mundial relativamente reducido y con unos modelos de negocio que se basan en la ruptura con los modelos tradicionales, David Older, responsable de renta variable de Carmignac, estima que estas valoraciones están justificadas.
“No creemos que en este momento los mercados públicos estén experimentando una burbuja tecnológica como la que observamos en el año 2000. Actualmente, los grandes actores del sector tecnológico son plataformas globales a ‘hiperescala’ que arrojan un sólido crecimiento de forma constante”, dice el gestor.
Además, Older recuerda que las empresas están generando unos niveles elevados de efectivo, lo que les permite realizar grandes inversiones en su crecimiento futuro, tanto orgánico como a través de adquisiciones. “En términos de valoración, si atendemos a la ratio PEG (PER/crecimiento), el sector informático sigue mostrando unos niveles relativamente interesantes”, añade.
El responsable de renta variable de Carmignac atribuye el retroceso visto recientemente en el sector principalmente a una cuestión de posicionamiento. Cree que tras la aceleración de la valoración de estos activos desde principios de año, esta caída no es de extrañar. Sin embargo, explica, la tendencia de los bonos del Tesoro estadounidense a diez años sí resulta un indicador clave que debe tenerse en cuenta porque “una drástica subida de los tipos podría perjudicar al sector”.
Fusiones y adquisiciones
De cara a un futuro no muy lejano, Carmignac espera que se produzca una aceleración en las fusiones y adquisiciones en el sector durante el segundo semestre de 2017. Es probable, apunta Older, que un marco fiscal y regulatorio más favorable, junto con el fortalecimiento de la economía mundial, sea un catalizador de las fusiones y adquisiciones de gran envergadura.
Tras el nombramiento de los responsables del Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) por parte de la Administración Trump, se espera que se apruebe la adquisición de Time Warner por parte de AT&T, lo que podría dar lugar a otras fusiones, como la que se especula entre Sprint y T-Mobile (que ocupan el tercer y cuarto puesto respectivamente en el sector de comunicación inalámbrica en EE. UU.). “Esperamos que estas operaciones den lugar a otras”, cuenta.
“Nuestra exposición al sector tecnológico se mantiene estable desde el inicio del año. Hemos recogido beneficios en algunos gigantes del segmento de Internet (recogidas parciales en Facebook, Amazon y Tencent, y liquidación de nuestra posición en Microsoft) y hemos incorporado nuevos valores. A principios de año, iniciamos posiciones en ASML y NVIDIA —ya que creemos que cuentan con una posición óptima para sacar partido de las tendencias en auge del edge computing— y en la plataforma de productos de ocio interactivo Activision, que se beneficiará del pujante interés en los deportes electrónicos a escala mundial”, afirma Older.
Empresas de software
El responsable de renta variable de la gestora francesa cree que las firmas de software para empresas registran las valoraciones más elevadas del sector tecnológico, pero también las tasas de crecimiento más altas.
“Los inversores deben ser selectivos en este segmento, ya que cualquier indicio de ralentización en el crecimiento conlleva una marcada caída en las valoraciones. Priorizamos las empresas de software en la nube, como ServiceNow (NOW), que presentan un rendimiento estable en un enorme mercado potencial a escala mundial y la posibilidad de fusionarse con firmas de mayor envergadura del mismo segmento que desean impulsar su exposición a la nube (GOOG, ORCL, CRM, MSFT)”, concluye.