Como cada mes, Bank of America Merrill Lynch ha presentado los resultados de la encuesta que realiza, a nivel global, a los gestores de fondos y que sirve de termómetro para ver cómo evoluciona su percepción del mercado. En esta ocasión, la encuesta da dos calves: el optimismo sobre la crecimiento global cae y los inversores venden activos de mercados emergentes y de banca.
La encuesta señala que el 24% de los encuestados espera que el crecimiento mundial se reduzca durante el próximo año. En comparación con la percepción de agosto, se podría decir que el sentimiento negativo ha aumentado ya que aumentó un 7%. Además, suponen las peores perspectivas sobre la economía mundial desde diciembre de 2011, según explican desde BofA Merrill Lynch.
Otro de los elementos que destacan los encuestado es el fin de la sincronización del crecimiento. Según sus conclusiones, el 48% considera que al final Estados Unidos sufrirá una desaceleración de su crecimiento, mientras que el 28% cree que éste se acelerará en Asia y Europa. Los riesgos que perciben los gestores tiene mucho que ver con su percepción del crecimiento global. En este sentido, la guerra comercial sigue siendo lo que más preocupa –aunque pierde relevancia–, desaceleración de China y el recorte del programa QE.
La encuesta también refleja los activos en los que los inversores se están fijando y cuál es su posición: largos en FANG, cortos en renta variable emergente y largos en Estados Unidos. En este sentido, los encuestados afirman estar sobreponderados en renta variable.