En un entorno volátil, y con fuerte actividad tanto de entrada como de salida en fondos de inversión por parte de los partícipes españoles, las gestoras pueden usar herramientas que les ayuden a gestionar mejor los reembolsos, como establecer periodos de preaviso para los mismos, o implantar métodos de valoración que protejan a los partícipes existentes de los flujos hacia y desde los fondos, como el valor liquidativo dual o el swing pricing.
En este sentido, la gestora value española Bestinver, y en línea con las recomendaciones de la CNMV –que instaba, en su boletín trimestral, a las gestoras a utilizar los precios bid o el swing pricing para ayudar a valorar mejor las carteras ante la volatilidad de flujos en este entorno de pandemia-, ha anunciado su intención de utilizar los precios de compra o de venta para la valoración de las posiciones mantenidas en cartera y también de realizar ajustes en el valor liquidativo aplicando el swing pricing.
Las medidas podrían aplicarse a sus cuatro fondos de renta fija y mixtos: Bestinver Renta, Bestinver Corto Plazo, Bestinver Patrimonio y Bestinver Bonos Institucional.
En un hecho relevante publicado en la CNMV, la gestora comunica a sus clientes que, “por decisión de su consejo de administración, a partir del 18 de mayo de 2020, aplicará unos procedimientos de valoración que tengan en cuenta la situación de suscripciones o reembolsos netos de las IICs, en concreto, la utilización de precios de compra o de venta para la valoración de las posiciones mantenidas en cartera, y adicionalmente, de manera excepcional, la realización de ajustes en el valor liquidativo, a través del mecanismo conocido como swing pricing”.
Según la gestora, el propósito de este mecanismo de ajuste es “repercutir a los partícipes del fondo que pudieran provocar movimientos de entrada o de salida significativos los costes adicionales en los que se pudiera llegar a incurrir para ajustar las carteras por dichos movimientos, y bajo circunstancias excepcionales de mercado donde la valoración con cotizaciones de compra o de venta no recojan adecuadamente los precios reales a los que podrían ejecutarse las operaciones”.
Es decir, la idea de este procedimiento de ajuste de valoración, que utilizan las principales gestoras globales desde hace tiempo, es asegurar de la mejor manera posible el principio de equidad entre todos los partícipes de un fondo, puesto que busca que el coste generado por las operaciones de suscripciones o reembolsos netos significativos sea soportado por los partícipes del fondo que producen dichos movimientos, ya sean de entrada o de salida.
La aplicación efectiva de este mecanismo supone que, si el importe neto de suscripciones o reembolsos de un fondo supera el umbral establecido en los procedimientos internos de la entidad, expresado en un porcentaje del patrimonio de fondo, se activará el mecanismo ajustando el valor liquidativo al alza o a la baja por un factor determinado también en los procedimientos internos, para tener en cuenta los costes de reajuste imputables a las órdenes netas de suscripción y reembolso.
Todos estos ajustes de valoración que se realicen no tendrán impacto alguno en las inversiones de aquellos participes que no realicen operaciones en las fechas en las que sean realizados, aclara la gestora en su comunicado.
Estas medidas de ajuste en el valor liquidativo no requieren de ningún tipo de actuación por parte del partícipe, ni tienen ningún impacto sobre la política de inversión, el perfil de riesgo/rentabilidad, ni sobre los costes de los fondos de inversión a los que resulten de aplicación, aclara también.
Condiciones de mercado excepcionales
Los mercados de renta fija, en condiciones normales, ofrecen la capacidad de realizar operaciones de compra y de venta de títulos a precios similares a los precios de valoración. Pero en condiciones de mercado extremas y elevados volúmenes de transacción, las operaciones de compra o de venta pueden alejarse del precio de referencia habitual, explica la gestora en una carta a sus inversores.
«Precisamente, el nuevo procedimiento permite que el precio del fondo de inversión se adapte a las condiciones especiales del mercado en ese momento, permitiendo así que el partícipe realice la operación al precio real de transacción y que por lo tanto no implique un perjuicio para el resto de los partícipes del fondo», explica Bestinver.