Banco Inversis presentó recientemente su estrategia anual, dentro de la IV edición del evento anual Claves 2017. La entidad apunta a un año marcado por el cambio de presidencia de Estados Unidos y por las diferentes citas políticas en Europa, que condicionarán la evolución de la economía y de los mercados durante el próximo año.
Banco Inversis apuesta por un asset allocation que sobrepondera la renta variable con 10 puntos porcentuales e infrapondera la renta fija con 15 puntos porcentuales, con respecto a sus respectivos benchmarks, con el objetivo de favorecer las ganancias de capital sobre la búsqueda de renta. En renta variable, la entidad se inclina por concentrarse en Europa y mercados emergentes; en contra de su apuesta en renta fija, donde infrapondera especialmente estos dos mercados.
A propósito de la situación de la renta variable, Banco Inversis nota que las ganancias empresariales en EE.UU. se verán directamente beneficiadas por la bajada de impuestos de Trump. A pesar de esto, la entidad prefiere fijarse en Europa, un mercado que, en opinión de Henrik Lumholdt, estratega jefe de Banco Inversis, “continúa estando castigado e infravalorado”, lejos de reflejar su mejora macro relativa a otros mercados, y que carga con una prima de riesgo excesiva por el factor político.
En cuanto a la renta fija, el mercado continúa a la expectativa, esperando un aumento de la inflación que tardará algo en llegar, pero que resta atractivo a este tipo de inversión. El riesgo en cuanto a la política monetaria es asimétrico, con más probabilidad de una sorpresa al alza de los tipos que lo contrario. Con esto, Banco Inversis ve cierto valor en el high yield europeo, pero prefiere concentrar el riesgo en la renta variable.
La vista puesta en Estados Unidos
2017 está marcado desde sus comienzos por la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos y las medidas económicas que prevé poner en marcha a lo largo de la legislatura. En lo que Lumholdtha llamado ‘Trumponomics’, la entidad ha analizado las implicaciones del nuevo programa económico. Banco Inversis destaca que el nuevo protagonismo de la política fiscal implica una más rápida normalización de la política monetaria, mientras que el retorno a la desregulación, característico del periodo previo a la crisis financiera, puede animar el sentimiento empresarial americano. Sin embargo, las nuevas tendencias hacia el proteccionismo en EE.UU. influirán al sentimiento económico global.
Con todo, Banco Inversis apuesta por un mayor crecimiento de EE.UU., debido fundamentalmente al estímulo fiscal. La sustitución de la actual deflación por reflación y nuevas tensiones en los mercados emergentes, son otras de las consecuencias inmediatas a las que apunta la entidad. En cuanto a la política monetaria, las divergencias entre la Fed y el BCE serán cada vez mayores. A propósito de las próximas decisiones de los bancos centrales, Lumholdt afirmó que la Fed podría incluso superar las tres subidas de tipos previstos para el 2017, “aunque dependerá en gran medida de la implementación de las medidas fiscales de Trump y de la reacción del dólar a estas”. En cuanto al BCE, Banco Inversis apuesta por un periodo de tranquilidad durante 2017, dado el plan adelantado por Mario Draghi hasta 2018.
Sobre si son o no buena idea las medidas propuestas por Trump, Lumholdt apuntó que, “estimular una economía que está en pleno empleo no sigue el manual”, pero en cualquier caso, “la prueba final será la capacidad del programa de contrarrestar las debilidades estructurales de la economía americana, especialmente el bajo crecimiento de la productividad”.
En el análisis de la economía macro, Banco Inversis apuesta por una economía global que mejora en 2017 en comparación con 2016, soportada por el aumento de la actividad manufacturera y la recuperación del empleo en las economías desarrolladas. En Estados Unidos, apunta a un crecimiento que repunta sobre todo a partir del primer semestre de este año, soportado por la mejora del sentimiento del consumidor y la disminución del riesgo de recesión. La entidad cree que cualquier incertidumbre en cuanto al crecimiento tendrá más que ver con la aprobación e implementación del programa económico de Trump que con otros factores.
En cuanto a la zona Euro, Lumholdt afirmó que esta “brilla más por su estabilidad que por su dinamismo” pero se mostró optimista, apuntando a una política fiscal levemente expansiva y un sector exterior favorecido por un debilitamiento del euro.
¿Y los riesgos?
En cuanto a los riesgos, Banco Inversis apunta las claves a tener en cuenta este año: el ciclo global, donde cree que es crítico que se eviten guerras comerciales y tensiones geopolíticas, “que pueden estropear la estabilidad”, según Lumholdt. El precio del petróleo sigue siendo un riesgo, pero los acuerdos alcanzados por la OPEP y la no-OPEP para reducir la producción lo ha disminuido sustancialmente. No obstante, el potencial al alza del precio del petróleo se limita por la probable recuperación de la producción de shale de parte de Estados Unidos.
La agenda política europea marcará también este año, que puede hacer temer de nuevo una desintegración del euro. La entidad se ve más optimista en este sentido, apoyada en que “la zona Euro está más preparada que nunca para esta agenda. Factores como el Brexit, o las presiones de Trump a Europa, pueden incluso ayudar a reforzar y unir a los países alrededor del proyecto del euro”, como apuntó Henrik Lumholdt en su presentación.
Por último, la posición de China y el yuan preocupa especialmente a la entidad; por un lado el país no puede mantener su ritmo de crecimiento; por otro lado, el vínculo del yuan con el dólar se ve cada vez más vulnerable, perjudicado adicionalmente por la posición de Trump con respecto a las relaciones bilaterales.
Mejora en emergentes
Sobre los emergentes, Banco Inversis destaca la mejora en los fundamentales de algunas divisas como punto favorable para fijarse en este mercado, a pesar del fortalecimiento del dólar. Por otro lado, la inflación empieza a reducirse en algunos de los grandes emergentes, mientras que su posición cíclica ha mejorado. Con todo, el potencial de crecimiento de los emergentes sigue siendo mayor que el de los países desarrollados, lo que invita al optimismo para el medio plazo. En opinión del estratega jefe de Banco Inversis, “apostamos por incluir emergentes en nuestras carteras como valor profundo y con un horizonte temporal más largo que en el caso de los desarrollados”.
Claves 2017 es la IV edición del evento sobre estrategia de mercados que Banco Inversis organiza anualmente y en el que este año se han dado cita más de 100 asistente. Además, por primera vez, la entidad ha retransmitido el evento por streaming en aquellos países donde tiene presencia, de manera que otro centenar de invitados pudieron disfrutar en directo de las conferencias.
Alrededor de la estrategia de mercados, Banco Inversis reunió a gestoras de prestigio alrededor de dos mesas redondas. En la primera de ellas, discutieron sobre renta fija y sus expectativas Marion Le Morhedec, Senior Fund Manager en AXA Investment Managers; Enzo Puntillo, Head of the Fixed income Team en GAM; Mondher Bettaieb Loriot, Head of Corporate Bonds en Vontobel, y Guendalina Bolis, directora general de Inversis Gestión, como moderadora. En una segunda mesa, David Poulet, Portfolio Manager en Amiral Gestión; Gunther Westen, Head of Asset Allocation en Oddo Meriten AM, y Wim-Hein Pals, Fund Manager en Robeco The Investment Engineers, ofrecieron su visión sobre la renta variable y qué esperan del 2017.