La gran sorpresa para los inversionistas internacionales en lo que va de 2014 ha sido el rendimiento de los bonos gubernamentales de países centrales. Según explica en su carta mensual el CIO de Pioneer Investments, Giordano Lombardo, al comenzar el año, la mayoría de los inversionistas eran pesimistas con respecto a los bonos del Tesoro de Estados Unidos y, en un menor grado, a los bonos alemanes.
“Hoy, se han hecho muchos intentos por explicar por qué los actuales rendimientos bajos son justos. La japonización de la economía de los países desarrollados (crecimiento bajo persistente y fuerzas deflacionarias), es el concepto que subyace a esta convicción”, dice.
En la gestora ven cada vez más señales de que la historia que asegura que “esta vez es distinto”, está cobrando nueva fuerza en el mercado. Y no comparte el consenso.
“No compartimos el consenso: aún creemos en la existencia de ciclos económicos de corto plazo y en la reversión a la media de los mercados financieros”, explica Lombardo. En ese sentido, a su parecer, la tendencia más probable para el rendimiento de los bonos gubernamentales de largo plazo es a la alza, a raíz de la normalización de las condiciones económicas.
No obstante, la normalización del rendimiento de los bonos a largo plazo puede desarrollarse con lentitud mientras que la inflación, el peor enemigo de los bonos, sigue brillando por su ausencia en esta recuperación posterior a la crisis; que las regulaciones respaldan la demanda de activos seguros y que estamos lejos de un sobrecalentamiento de la economía a escala global.
Las otras clases de activos principales, en particular las acciones y aún más los mercados crediticios, no muestran valuaciones especialmente convincentes. El resultado, en conjunto, es que confirmamos únicamente una opinión negativa moderada sobre los bonos gubernamentales de países centrales en nuestra asignación de activos.
La estrategia de inversión más adecuada, según la gestora, es un acercamiento de diversificación balanceada, que apela a continuar la preferencia por los activos de riesgo pero de manera cada vez más cauta y selectiva. “Asimismo, el precio de la volatilidad en niveles razonables ofrece la oportunidad de comprar protección ante cualquier riesgo bajista de las acciones”.