Aguas Andinas colocó con éxito su primera emisión de bonos verdes y sociales en la Bolsa de Santiago, inaugurando este segmento de renta fija en el mercado chileno. Los fondos obtenidos se utilizarán para financiar proyectos que cumplen con los requerimientos delineados en los principios de Bonos Verdes y Sociales. Estos son proyectos con impacto ambiental y social positivo.
“Nos sentimos muy orgullosos de ser la primera empresa chilena en colocar un bono verde y social en Chile, ya que esto quiere decir que las decisiones de inversión de la compañía tienen un componente muy fuerte en el impacto positivo para la comunidad y el medioambiente de los proyectos que estamos desarrollando”, dijo Guillermo Pickering, presidente del directorio de Aguas Andinas.
“Poder emitir un bono verde es un reconocimiento a que la empresa cumple con principios básicos de transparencia, información e integridad”, añadió.
El presidente de la Bolsa de Santiago, Juan Andrés Camus, dio la bienvenida a Aguas Andinas a este mercado, que “abre la posibilidad de que distintos emisores e inversionistas puedan inscribir y negociar bonos corporativos, bancarios y gubernamentales, con el objetivo de financiar proyectos que posean un impacto positivo en el medioambiente, o en un determinado grupo de la población o una combinación de ambos”, destacó.
La emisión de 1.500.000 UF (unos 33 millones de dólares) se colocó a una tasa de 1,80%, equivalente a un spread de 53 puntos base, con una demanda que superó en 3,6 veces el monto ofrecido al mercado. El agente colocador fue BBVA. El bono tiene un plazo de 7 años, con tres de gracia.
Esta operación es la primera de sus características que realiza una empresa chilena a través de la Bolsa de Comercio de Santiago. La calificación de “Bono Verde y Social” garantiza que los fondos obtenidos se destinan al financiamiento de proyectos con impacto ambiental y social positivo, utilización que es certificada por la agencia clasificadora internacional Vigeo Eiris.
Deneb Schiele, Head of Debt Capital Markets de BBVA Chile, entidad que actuó como asesor financiero y agente colocador exclusivo de este primer bono verde y social en el mercado local, destacó que “el bono de Aguas Andinas fue ampliamente demandado por los inversionistas, lo que demuestra no sólo la gran confianza de los inversionistas en la compañía sino el creciente interés en alternativas de financiamiento que promuevan una mayor responsabilidad ambiental y social”.
Schiele agregó que “vivimos en un entorno en el que las empresas tienen cada vez más conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad, por lo que esperamos que los bonos verdes y sociales se vayan consolidado como una alternativa de financiamiento en Chile, tal como está ocurriendo en otros mercados más desarrollados”.
Con esta operación, Aguas Andinas demuestra su compromiso con una gestión sustentable, alineándose con los criterios ASG (Ambiental, Social y de Gobernanza) y asumiendo la aplicación de estándares internacionales en sus operaciones.
La firma de servicios ambientales plantea que el desarrollo sostenible es el principal camino para garantizar un buen futuro, tanto para Chile como para el mundo y con su gestión contribuye directamente al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por Naciones Unidas en 2015, aportando de manera concreta en 15 de los 17 objetivos.
Aguas Andinas puso en marcha en 2016 su nueva estrategia corporativa, Santiago Merece un 7 (SM7), que consta de 7 pilares o ejes estratégicos que señalan la ruta y los desafíos de la compañía en el mediano plazo, con el fin de asegurar la sustentabilidad de sus operaciones. De este modo, todas las inversiones realizadas por la empresa se emplazan bajo esta estrategia que busca lograr su compromiso de desarrollo sostenible.