El aumento de los contagios a causa de la nueva variante Ómicron ha llevado a las firmas de Wall Street y otras compañías a reconsiderar sus planes de regreso a la oficina.
Morgan Stanley les dijo a los empleados que tenían que estar en la oficina durante las dos primeras semanas de enero que se cubrieran la cara cuando no estuvieran en sus escritorios y que limitaran las reuniones grandes en persona.
«Esta guía se aplica a todos los lugares (incluso aquellos donde todos están completamente vacunados)», solicitó a los empleados en un memorando emitido por la entidad esta semana, informa Advisorhub.
Además, el texto exclamaba que «siempre se recomienda el uso de máscara para cualquier persona que tenga un mayor riesgo o que tenga un miembro del hogar que no esté vacunado o que tenga un mayor riesgo».
Por otro lado, Citi anunció la semana pasada a los empleados, que sus tareas se lo permitan, del área metropolitana de Nueva York que podrían volver a trabajar desde casa durante las vacaciones de invierno.
Jefferies Financial Group, en cambio, pidió a sus empleados que trabajaran de forma remota y recibieran un refuerzo de la vacuna para fines de enero, y el director ejecutivo Rich Handler se puso en cuarentena después de dar positivo a principios de este mes, informa el medio especializado.
Si bien la nueva variante no es de alto riesgo para quienes esten vacunados, es altamente contagiosa, lo que ha llevado a que se suspendan cientos de vuelos por las vacaciones y muchas empresas y servicios esten tomando nuevas medidas para evitar contagios masivos.