En los últimos años, ha aumentado el interés en la inversión temática y por sectores. Ahora, con el impacto del coronavirus en la sociedad, la economía y las finanzas de todo el mundo, se están fortaleciendo ciertas tendencias a largo plazo relacionadas con la tecnología y la salud. En esta entrevista con Funds Society, la estratega senior de renta variable de SPDR ETFs, Rebecca Chesworth, apunta a las oportunidades que pueden hallar los inversores en ambos y destaca el carácter defensivo del sector sanitario, impulsado ahora por el incremento del gasto público y la necesidad de ofrecer soluciones urgentes ante el COVID-19.
Sus cualidades defensivas tienen que ver con que se trata de un negocio fiable, generalmente con una sólida oferta y demanda, buen flujo de caja y baja beta y volatilidad. “De hecho, en los últimos meses, hemos visto cada vez más inversores institucionales comprando ETFs de renta variable del ámbito de la salud para reducir sus infraponderaciones históricas respecto a la media de los últimos 5 años, según los datos agregados de State Street a nivel global”.
Según la estratega de State Street Global Advisors, en la crisis actual, la cadena de suministro de muchas empresas que prestan servicios sanitarios podría sufrir un impacto negativo por la dificultad para acceder a recursos materiales y de investigación. “Pero habrá algunas que incluso tendrán oportunidades”.
En ese sentido, las beneficiadas serán aquellas capaces de dar respuesta a los retos que plantea el COVID-19. Es decir, las proveedoras de pruebas que faciliten el diagnóstico de la infección (como Roche, Qiagen o Thermo Fisher), aquellas enfocadas en investigación que puedan presentar rápidamente una vacuna (como GlaxoSmithKline, Merck, Pfizer o Sanofi) y las que puedan ofrecer medicamentos adecuados para el tratamiento del virus (como AbbVie, Gilead Sciences o Johnson & Johnson).
“Nadie sabe quién va a lograrlo, así que los inversores que quieran tener exposición a esta oportunidad deberían invertir en el sector a nivel global”. En ese sentido, destaca que el SPDR MSCI World Health Care UCITS ETF permite con una sola operación acceso a todas estas compañías, iniciativas globales y avances médicos.
Chesworth recuerda que, a comienzos de año, existía cierta preocupación de los inversores sobre este sector en Estados Unidos, debido a que determinados candidatos presidenciales demócratas, como Bernie Sanders y Elizabeth Warren, proponían legislaciones más duras relacionadas con la cobertura pública de la salud. Sin embargo, parece que Sanders está quedando detrás de Joe Biden. Además, la legislación que pretendía aprobar Donald Trump y que perjudicaría al sector farmacéutico es “muy complicado que salga adelante ahora”.
Por todo ello, “el contexto es mucho más favorable” y la actividad en sectores norteamericanos tomará mayor dinámica conforme se acerquen las elecciones presidenciales en noviembre, por lo que la gestora propone el SPDR S&P U.S. Healthcare Select Sector UCITS ETF como herramienta de posicionamiento.
La tecnología resiste
Otro de los sectores que está experimentando caídas muy inferiores al resto es el de la tecnología. “No es defensivo, pero las perspectivas de beneficios se sostienen mucho mejor y China se está recuperando, lo que hace que el sector tecnológico sea una inversión interesante tanto a corto como a largo plazo”. También destaca que el área de semiconductores ha mejorado, ya que la oferta no ha caído como se esperaba. “Hay ciertos problemas porque muchas cadenas de suministro arrancan en China, pero empresas como Apple o Microsoft pueden acceder a ella de todas formas y la demanda sigue existiendo”, añade.
Asimismo, apunta que es muy probable que toda la demanda que estas compañías del sector pierdan en la primera mitad del año lo recuperarán en la segunda. “Sin embargo, otros sectores, como el del consumo minorista, no van a poder rescatar esa demanda perdida”.
Un fenómeno global
Chesworth revela que, a la hora de tomar decisiones de inversión en ETFs de renta variable, suele inclinarse o bien por Europa o bien por Estados Unidos, ya que tienden a atravesar ciclos económicos diferentes. Es lo que ocurrió en 2019: EE.UU. tuvo un buen año y Europa no comenzó a ver una recuperación hasta finales del año.
Sin embargo, ahora, la pandemia es global y, por ende, la ralentización económica también lo es. Por ello, a su juicio, lo más recomendable sería centrar las inversiones en los sectores con mejores oportunidades de crecimiento (como salud y tecnología), antes que elegir una región específica. “Los ETFs sectoriales de SPDR con exposición global podrían ser una buena alternativa para reposicionar las carteras”, afirma.
Con todo, recomienda los seis ETFs de State Street en los dos sectores:
Salud
SPDR MSCI World Heath Care UCITS ETF (ticker: WHEA)
SPDR S&P U.S. Health Care Select Sector UCITS ETF (ticker: SXLV)
SPDR MSCI Europe Heath Care UCITS ETF (ticker: STW)
Tecnología
SPDR MSCI World Technology UCITS ETF (ticker: WTEC)
SPDR S&P U.S. Technology Select Sector UCITS ETF (ticker: SXLK)
SPDR MSCI Europe Technology UCITS ETF (ticker: STK)
SPDR ofrece amplia información sectorial actualizada de manera regular en su página web (SPDR Sectors) y presenta un análisis más exhaustivo de la inversión sectorial y sus perspectivas en el informe ‘Sector Compass’ que publica de manera trimestral. El documento del segundo trimestre será publicado en los próximos días.