Según los datos que muestra el informe Money Monitor 2019, elaborado por Lyxor ETF Research, 2019 fue un año histórico para el mercado de ETFs, y en particular para los de renta fija. Como novedad, este documento ha logrado monitorizar los flujos que llegan a los ETFs desde fondos de gestión activa, y explicar las principales tendencias que marcaron el año.
En 2019, por primera vez, los ETFs europeos han reunido un récord de 100.800 millones de euros, con lo que el total de activos asciende a 870.000 millones de euros, lo que significa un 40% más en comparación con 2018. La firma explica que “esto es el resultado de un crecimiento acelerado en Europa durante los últimos cinco años, en comparación con el crecimiento en el mercado estadounidense más maduro: 20% más frente al 19% registrado en Estados Unidos”.
Los cálculos del documento indican que los ETFs representan ya el 7% del total de los activos de los fondos europeos, frente al 6% que suponían en 2018. Mientras que los ETFs de renta variable representan el 69% del mercado, los de renta fija el 27% y los de materias primas el 3%, mientras que el resto corresponde a las demás clases de activos.
Renta fija vs renta variable
Para Lyxor ETF, el 2019 fue sin duda el año de la renta fija, ya que los flujos de entrada alcanzaron los 54.000 millones de euros, con lo que el total de activos se elevó a 234.000 millones de euros frente a los 152.000 millones de euros de 2018. “Los inversores europeos se volcaron en las oportunidades de mayor rendimiento (bonos corporativos, bonos del gobierno de EE.UU., bonos de mercados emergentes, High Yield) y la diversificación geográfica fue clave, sobre todo fuera de Europa. Aunque el segmento de ETF de renta fija ha tardado varios años en despegar, la tendencia observada en los últimos 5 años parece sólida y resistente, con una media de 26.000 millones de euros de entradas anuales”, explican.
En cambio, fue un año irregular y de contrastes para renta variable. Los mercados de renta variable europeos se vieron afectados por las crecientes incertidumbres macroeconómicas. Hubo la amenaza de no acuerdo con el Brexit en la primera mitad, pero en la segunda mitad se produjo un fuerte repunte gracias al alivio de las tensiones comerciales. En este sentido, los ETFs se beneficiaron del rebote, reuniendo 46.000 millones de euros, mientras que los fondos de renta variable activos tuvieron salidas de 43.000 millones de euros. La renta variable británica fue un ejemplo interesante de la rotación de fondos open-ended a los ETF. Y los ETF Smart Beta también han experimentado un crecimiento récord, con una un flujo acumulado de 9.400 millones de euros el año pasado. Los flujos se destinaron principalmente a las estrategias de generación de ingresos, de Value y de volatilidad mínima/varianza mínima.
“En el contexto de Brexit, observamos flujos muy fuertes hacia los ETFs de renta variable del Reino Unido a finales de 2019, por un total de 7.100 millones de euros en los últimos 4 meses. Estos flujos no se han observado en los fondos activos. Un año récord para los ETFs ESG y Smart Beta Los cambios regulatorios y la creciente necesidad de vehículos de inversión sostenibles en todo el espectro de inversores han alimentado un auge en el segmento del ESG, que ha acumulado una cifra récord de 16.500 millones de euros de nuevos activos netos el año pasado, elevando el total de activos bajo gestión a 30.500 millones de euros”, señalan.
Para Vincent Denoiseux, director de investigación y soluciones de ETF de Lyxor Asset Management, «la cuota de mercado de los ETFs ha aumentado de forma constante durante las dos últimas décadas, lo que subraya la creciente adopción entre los inversores europeos. Con esta publicación enriquecida que incluye los flujos hacia los fondos activos, nuestro objetivo en Lyxor es ayudar a los inversores a obtener una imagen aún más detallada de las tendencias en juego en la industria y de la asignación de flujos entre la gestión activa y la pasiva».
Los datos de este informe se basan en el análisis de los flujos de 47.000 fondos y ETFs. Según la gestora, el documento ofrece una visión completa de las principales tendencias y factores de impulso de la industria europea de gestión de activos.