A pesar de la opinión generalizada de que los inversores más jóvenes son los mayores fans de los fondos cotizados , un nuevo libro blanco -elaborado por Pershing en colaboración con Beacon Strategies– muestra que los mayores usuarios son los inversores con edades comprendidas entre los 51 y los 70 años que trabajan con asesores, seguidos por los mayores de 71 años.
El informe “The Evolving ETF: Using Exchange Traded Funds in Client Portfolios” (La evolución de los ETFs: el uso de fondos cotizados en carteras de clientes) -para el que se entrevistó a más de 1.500 asesores en todo el mundo- muestra que más del 66% de los que ya utilizan ETFs tiene intención de aumentar su uso durante los próximos 12 meses, y el 55 % señaló que más de la mitad de sus clientes ya cuentan con ETFs en sus carteras.
«La suposición generalizada en la industria es que el continuado crecimiento y la popularidad de los ETF está siendo impulsada por los inversores más jóvenes. Sin embargo, los asesores revelan que esto no es necesariamente así», declara Justin Fay, director de soluciones financieras para inversiones alternativas y ETFs en Pershing. «Hemos visto que el uso de ETFs es más prominente en las carteras de los Baby Boomers y mayores, sobre todo porque estos inversores son cada vez más conscientes de que la eficiencia de costes y el fácil acceso a la variedad de estilos que los ETFs puede ofrecer les ayudan a alcanzar su metas financieras», agregó.
Otras de las conclusiones apuntan a que los asesores ven los ETFs como inversiones críticas en las carteras de los clientes, pues el 64% dijo que son la “esencia” de las carteras de sus clientes. Si bien su peso varía de unas carteras a otras, el 55% de los asesores declaró que más de la mitad de sus clientes tenían ETFs en sus carteras.
El trabajo también muestra que el rendimiento es el criterio clave para la elección de un ETF específico en el 43% de los casos y que el reconocimiento de marca es menos importante (solo lo citó el 2%). Por último, entre las grandes conclusiones está la necesidad de más educación sobre el producto y posibles mejoras en la estructura, pues -según los asesores- la mayor barrera para su uso son las “preocupaciones sobre la estructura de los ETFs”.
«Los ETFs puede ser una opción de inversión especialmente atractiva para los asesores, pues ofrecen soluciones personalizables y un acceso potencialmente más barato a mercados, países y sectores que muchos otros vehículos de inversión comparables. Mientras que los RIAs siguen dominando el uso de ETFs, estamos viendo cómo aumenta su adopción a través de otros canales, en particular el de los broker dealers independientes que están implementando el uso de ETFs con más frecuencia, y esperamos que se mantenga la tendencia”, concluye Fay.