Los fondos de la gestora XP Gestão, que antes eran distribuidos internamente por un equipo de la propia gestora, pasarán a ser responsabilidad de XP Investimentos, la división de wealth management del grupo brasileño independiente XP.
“La tercerización de la distribución de los fondos de XP Gestão para XP Investimentos es positiva, pues permite que los representantes de ventas tengan una atención más completa a los clientes, pudiendo ofrecer además de fondos, productos de XP, lo que aproxima más aún la relación con el cliente institucional”, comenta Rafael Quintas, socio de XP Investimentos y responsable de la distribución de los fondos de XP Gestão para clientes institucionales. “Además, en estos seis meses de distribución, el equipo dejó de ser una persona con foco en fondos para tener 8 personas actualmente, pudiendo segmentar entre fundaciones y Regímenes Propios de Previdencia Social (RPPS). Este equipo es mayor y diversificado, que difícilmente se puede ver en una gestora independiente, sólo fue posible gracias a que XP ya atendía a este tipo de clientes con otros productos, por lo que la suma de los fondos de XP Gestão fue muy natural”.
El porcentaje de clientes institucionales de XP Gestão aumentó desde cerca de un 15% que registraba el año pasado, hasta el 23% alcanzado este año. Dentro de la base de clientes institucionales, un 70% son family office, mientras que el 30% se restante se reparte entre fundaciones y Regímenes Propios de Previdencia Social.
“Entendemos que el porcentaje de Family Offices es mayor, debido a que son clientes que demandan fondos más sofisticados (fondos monetarios y renta variable), justamente donde XP Gestão ofrece una gran diferencia. Con un escenario político y económico más calmado, ya percibimos que las fundaciones están regresando a echar un ojo los fondos de acciones. Una mayor demanda por parte de los fondos de pensiones nos está llevando a participar en concursos con estas grandes fundaciones locales, y por ello creemos que en el medio plazo nuestros activos bajo gestión en fundaciones y RPPS podría ser mayor que el de las family office”, concluye Quintas.