El contexto regulatorio en Latinoamérica está mejorando las oportunidades de distribución de productos en la región para los jugadores transfronterizos, según las conclusiones de un reciente estudio de Cerulli Associates.
Según el informe, los canales institucional y de banca privada siguen representando más de dos tercios de toda la distribución de fondos, y la falta de sofisticación entre los inversores y su fuerte sesgo local desanima a las gestoras internacionales para tratar de llegar a la industria minorista. De hecho, la mayoría de los fondos de inversión de la región (con activos totales de 1,1 billones de dólares, de los que el 82% están en Brasil y el 11% en México) invierten menos del 5% en mercados foráneos.
“Creemos que los sistemas de pensiones regionales y el segmento de banca privada continúan presentando para los gestores globales y los proveedores de ETF la mayor oportunidad de distribución transfronteriza de productos en Latinoamérica”, comenta Nina Czarnowski, analista senior de Cerulli.
En primer lugar, los mercados de pensiones ofrecen una oportunidad creciente para las gestoras transfronterizas, mientras los reguladores se centran en abrir las puertas a las inversiones internacionales. Los sistemas de aportaciones obligatorios de Chile, México, Colombia y Perú siguen apoyando el crecimiento a pesar de las condiciones del mercado, mientras los gobiernos tratan de luchar contra la economía sumergida e impulsar las aportaciones. “Las contribuciones al sistema de pensiones en la mayoría de los mercados son obligatorias y, como consecuencia, están creciendo más rápidamente que sus respectivos sistemas financieros, llevando a los inversores hacia la necesidad de expandirse hacia los mercados internacionales”, dice la experta de Cerulli. La industria de pensiones tiene activos por 905.000 millones de dólares, de los que Brasil representa el 48%, seguido de México y Chile.
“Preocupados por las recientes devaluaciones de los mercados domésticos y la incapacidad de dar respuesta a la jubilación de los trabajadores, los jugadores de la industria, incluyendo los fondos de pensiones y los reguladores, están explorando de forma creciente formas para generar retornos mayores”, comenta la experta. “Para que los fondos de pensiones puedan hacer frente a sus responsabilidades, tiene sentido que se cubran con instrumentos de renta fija locales pero también lo tiene que diversifiquen la parte de renta variable de las carteras de forma global, dada la concentración y estrechez de los mercados domésticos”, añade.
En segundo lugar, las gestoras de activos que se dirijan a los inversores con mayor riqueza serán capaces de beneficiarse de la distribución de un mayor rango de productos y estrategias pues ese segmento tiende a contar con menores restricciones regulatorias.
Cerulli advierte de que uno de los mayores retos para la distribución transfronteriza en la región, sin embargo, sigue siendo la política. “Mientras los gestores de pensiones y los reguladores reconocen la necesidad de diversificar las carteras de pensiones en el exterior, a los gobiernos les interesa mantener las inversiones dentro de los países –sobre todo en proyectos de infraestructuras- para impulsar la economía y los negocios locales”.
No hay un modelo único de éxito
Otro reto es que no existe un pasaporte para distribuir productos o hacer negocio en toda la región, pues cada país tiene diferentes modelos regulatorios. “Los fondos transfronterizos ofrecidos en Perú pueden no ser los mismos que se acepten en México. Los canales de distribución utilizados en Chile pueden no ser populares en Brasil”, dice Czarnowski. Por eso, el informe añade que aunque se pueden destinar algunos recursos de forma común en la región, las gestoras globales deberían considerar estrategias que apunten a un mercado específico, dado que un solo plan podría no ser transferible de un país de Latinoamérica a otro.
“No hay un modelo único de éxito para Latinoamérica. Algunos gestores tienen éxito con productos internacionales o sin presencia local, pero otros han encontrado la fórmula del crecimiento con oferta local u oficinas onshore”, dice el informe. Eso sí, tener un compromiso de largo plazo con la región es crucial, pues el crecimiento es lento.
En su informe anual, titulado Latin American Distribution Dynamics 2014: Entry Points to Emergent Economies, Cerulli analiza las tendencias en distribución y desarrollo de productos en seis mercados clave de fondos de inversión y pensiones: Brasil, México, Chile, Colombia, Perú y Argentina.
¿Qué estrategia cuadra en cada país?
Por ejemplo, en Argentina, las gestoras que ganaron cuota de mercado el año pasado fueron aquellas que posicionaron sus productos para cubrir las necesidades de compañías aseguradoras y otros inversores que, evitando invertir en instrumentos internacionales, buscaron optiones similares entre los fondos de inversión. Las relaciones con aquellos que toman las decisiones de inversión es un factor clave, más que el producto o su rentabilidad. Por ello, las gestoras con flexibilidad y rapidez para adaptarse a los cambios regulatorios y de política económica son las que mayores probabilidades de éxito tienen. El informe señala que la experiencia, el track record o el cumplimiento normativo no tienen la influencia que sí tiene en otros mercados de la región.
Brasil, que cuenta con la mayor y más sofisticada industria de gestión de activos, con más de 2 bilones de dólares, y crece a doble dígito, continúa lejos de otros mercados en cuanto a desarrollo de la industria local se refiere y la oportunidad para las gestoras internacionales está en su robusta red de distribución. Así, las gestoras independientes siguen expandiéndose en el país ganando espacio en la distribución de terceros o en las plataformas de arquitectura abierta. En cuanto a las pensiones, Cerulli es más optimista con respecto a las oportunidades para las gestoras foráneas en el mercado de pensiones, pues el concepto de diversificación fuera de las fronteras es una decisión que están empezando a tener en cuenta los comités de inversión en su asignación de activos. Aunque la regulación sigue siendo muy restrictiva, los gestores de pensiones empiezan a contratar fondos domiciliados en el país que invierten en gestores internacionales, dice el informe.
En Chile, el sistema de pensiones sigue siendo un punto de referencia para la industria de gestión internacional, debido al tamaño de los fondos y a la libertad para invertir fuera. En diciembre del año pasado, el 42,4% del capital en pensiones fue invertido fuera del país. Aunque otros países tienen mayor potencial de crecimiento poblacional, Chile tiene ventajas en términos de formalidad de su mercado laboral, crecimiento de ingresos y reformas para incorporar a los trabajadores autónomos al sistema.
En Colombia, los fondos de pensiones están impulsando su asignación a activos internacionales a través de fondos y ETF. Las preferencias se deben a la diversificación del riesgo, a la búsqueda de mayor liquidez y al deseo de superar los retornos negativos obtenidos en las bolsas locales. Sin embargo, solo el 17,7% del sistema obligatorio de pensiones está en instrumentos internacionales, por debajo del nivel máximo del 40% impuesto por ley.
En México, las gestoras internacionales tienen oportunidades con el sistema de pensiones, a través de mandados separados para estrategias internacionales. “Las Afores están estudiando activamente un amplio rango de estrategias para añadir a sus carteras”, dice el estudio. Para aquellas que busquen al cliente retail, conviene que se ofrezcan como sub-asesores de fondos lanzados por gestoras locales en manos de bancos. Los bancos se benefician también pues les pemite retener su marca, expandir su base de productos y externalizar las responsabilidades de gestión.
En Perú, la inversión de los fondos de pensiones en instrumentos internacionales ha ganado peso, con las AFPs inviertiendo cerca del 40% de límite permitido por los reguladores. Desde Cerulli calculan que esta alta proporción de activos foráneos se mantendrá en las carteras, con una tendencia a tener exposición vía ETF y fondos más que con inversión directa, y siendo optimistas para el corto y medio plazo, ante las ventajas de la diversificación. A lo largo de este año, la Superintendencia del país eliminó la lista de productos aprobados y permite a las AFPs elegir esos productos conforme a los requisitos regulatorios.