Las fusiones y adquisiciones en la industria de asset management han repuntado abruptamente en los últimos dos años y medio en términos de número de transacciones e interés por parte de la prensa. La eficiencia en costes y la escala vuelven a estar sobre la mesa de negociaciones. Ser uno de los grandes jugadores del mercado ya no es suficiente.
Según una reciente encuesta realizada por Ignites Europe, el 95% de los profesionales de la industria de asset management esperan que haya una mayor consolidación en la industria, a la vez que los analistas exponen que las firmas de tamaño medio suelen ser los socios más atractivos para una adquisición.
“Esperamos una gran actividad de fusiones y adquisiciones en el sector. Sin embargo, las actividades de M&A no son ciertamente la solución más fácil para los desafíos de la industria. Hemos asesorado a algunas firmas de private equity con un conocimiento adicional sobre las empresas objetivo, las dinámicas del mercado, la predicción de tendencias y todo aquello que va más allá de la utilización de modelos financieros”, comenta Philip Kalus, socio director de accelerando associates.
“Por lo general, vemos demasiado enfoque en la escala potencial y en los efectos del ahorro en costes. A menudo, otros factores claves en términos de ofrecer nuevas proposiciones de valor, como las principales reacciones de los clientes y las restricciones del mercado, no suelen ser tenidos suficientemente en cuenta, a nuestro modo de ver”.
La industria de asset management, que sigue ofreciendo buenos márgenes e ingresos por ventas, se enfrenta a mayores presiones, principalmente en términos de costes de operación y una mayor complejidad a la hora de gestionar el negocio, mientras los márgenes comenzarán a reducirse.
Los reguladores, los grupos de consumidores y los grandes inversores están asestando golpes al modelo actual de asset management. En la actualidad, se ha presenciado un número creciente de acuerdos a gran escala, por ejemplo, la compra de Pioneer por parte de Amundi, o la fusión de Aberdeen con Standard Life. También se ha visto fracasar grandes acuerdos, como el caso del intento de fusión entre Santander y Pioneer.
Más allá de estas imponentes adquisiciones, la actividad entre firmas europeas de menor tamaño en la industria de la gestión de activos y de patrimonios ha crecido enormemente en los últimos años. Además, otros asset management extranjeros, por lo general asiáticos, de gran tamaño y con una alta disposición de efectivo merodean la región, por lo que cabría esperar más compras en Europa.
Conseguir una escala suficientemente grande y un impacto global en la distribución tienen cada vez un mayor peso. Los jugadores más grandes son cada vez más grandes, de forma orgánica y a través de adquisiciones. La escala es vista como el principal factor que propicia la actividad corporativa en la industria de asset management. Sin embargo, es justo afirmar que en realidad las valoraciones de los costes o de la escala, combinados con el potencial ahorro de costes son en realidad los principales motivos que se encuentran detrás de la mayoría de los acuerdos.
Brooks Macdonald, la gestora de fondos discrecionales británica fue un paso más allá, prediciendo que no habría ningún pequeño jugador en el mercado en dos años, según unas declaraciones realizadas en mayo de 2017. Por su parte, George McKay, responsable de la distribución global y responsable global del área de operaciones de AllianGI, comentó en marzo que la mayoría de las firmas de fondos de menor tamaño se verían fuera del mercado en un futuro. Pero todo depende de cómo se defina el tamaño, pues las gestoras con un alto alfa, o que ofrecen un alto servicio vinculado al alfa tienen mayores posibilidades para afrontar un futuro brillante. Son las gestoras de tamaño medio las que sufrirán más presión.