Según un informe publicado por BNP Paribas Asset Management y realizado por Greenwich Associates sobre la actitud de los inversores institucionales y del mercado de distribución ante la inversión temática, el 90% de los inversores considera que esta forma de enfocar su inversión tiene un «impacto positivo sobre la rentabilidad a largo plazo».
Así, los resultados del documento muestran un incremento en el interés de los inversores por el enfoque temático durante los últimos doce meses. Según el informe, el 88% de los inversores del mercado de distribución y el 36% de los inversores institucionales ya utilizan o tienen la intención de utilizar estrategias temáticas. De esta forma, se manifiesta un cambio estructural en la asignación de activos, dejando en segundo plano el concepto de clase de activo, factor geográfico y sector por la estrategia temática.
“La inversión temática se ha multiplicado por tres entre 2017 y 2020, con un importante apoyo por parte de distribuidores e inversores minoristas. Es una clara tendencia que hemos visto reflejada en España y Portugal”. A lo que añade: “Esperamos una aceleración de esta tendencia impulsada por un próximo cambio normativo, que incluye la integración de las preferencias ESG en las elecciones de los inversores en virtud de MiFID II, así como por la creciente demanda de las estrategias temáticas por parte de inversores institucionales”, explica Sol Hurtado de Mendoza, directora general de BNP Paribas Asset Management para España y Portugal.
El principal objetivo del 76% de los inversores a la hora de acudir a estrategias temáticas apunta hacia la sostenibilidad y los criterios ESG, seguido por la capacidad para mejorar los resultados de inversión (el 42%), la inclusión de un enfoque de inversión más innovador o disruptivo (el 36%) o el aumento de la diversificación (el 30%).
Auge de la temática sostenible
El contexto normativo y político internacional favorece este interés por los fondos temáticos sostenibles, con iniciativas como el Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles, la Taxonomía de la UE, el Pacto Verde europeo o la decisión de la administración de Biden de priorizar la reducción de la huella de carbono estadounidense y lograr un nivel de cero emisiones netas.
Más de tres cuartas partes de los participantes en el estudio aludieron a la sostenibilidad y a los criterios ESG como modelo de inversión de impacto positivo. Asimismo, mostraron preferencia por el marco establecido por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas (el 41%), seguido por las soluciones para el cambio climático (el 21%) y las energías renovables (el 18%).
Mayor interés por la tecnología e innovación
Durante la pandemia, la necesidad de adaptación a las nuevas circunstancias aceleró el proceso de la digitalización, este impulso ayudó decisivamente a mantener con solidez a los distintos sectores que tuvieron que enfrentarse a un nuevo paradigma digital.
Entre los temas de inversión relacionados con la tecnología y la innovación, los más atractivos para los encuestados fueron la salud (el 28%), la robótica y la inteligencia artificial (el 23%) y las tecnologías disruptivas (el 13%). Más del 50% de los participantes incluyen estos temas entre los tres que consideran más atractivos. Tras ellos aparecen temas relacionados con la disrupción, como la ciberseguridad, la biotecnología, el 5G y las ciudades inteligentes.
Atención a la renta fija
Si bien la inversión temática suele estar más presente en la renta variable, la renta fija genera cada vez un mayor interés. Según el estudio, la mayoría de los inversores acuden o tienen previsto acudir a la renta variable para la inversión temática (el 87%), seguida de la renta fija (el 42%), que se sitúa así por delante de los multiactivos y mercados privados (ambos el 30%).
Estos datos indican el crecimiento y la aceleración de la tendencia hacia la asignación en renta fija temática, lo que demuestra un cambio fundamental de enfoque de asignación de activos, del que la inversión temática comienza a convertirse en parte integrante.